Como un celoso centinela, el Centro de Barranquilla ha sido testigo de los hitos que han definido el rumbo en esta urbe de libres. Ha sido la punta de lanza de la economía y hoy vuelve a reverdecer con la recuperación de varias de sus más icónicas edificaciones.
La galería San Nicolás, Robertico y el emblemático edificio de Bancomercio han sido algunos de los puntos que han recuperado su belleza arquitectónica, en medio del 'ambicioso' proyecto para devolver su dinamismo a esta zona de la ciudad.
Manuel Belayes es uno de los beneficiados con esta iniciativa. Por más de 44 años, este vendedor de dulces artesanales estuvo a la intemperie. Hoy se encuentra ubicado en uno de los locales comerciales habilitados en estos espacios.