La Región Caribe tiene el primer observatorio para medir la violencia contra la mujer en los departamentos de Atlántico, Bolívar, La Guajira, Magdalena, San Andrés y Providencia y Sucre.
El Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses – Regional Norte con el apoyo de la Gobernación del Atlántico puso en marcha este centro de análisis e investigación ante los repetitivos hechos de violencia de género.
El anuncio de la nueva dependencia se dio a conocer ayer en un acto que se realizó en las instalaciones de la Universidad Simón Bolívar, en el que estuvieron presentes Carlos Eduardo Valdés Moreno, director nacional de Medicina Legal; María Isabel Smith Rovira, directora Regional Norte; Sandra Moreno, coordinadora del Centro de Referencia sobre Violencia, y Guillermo Polo, secretario del Interior del departamento.
'El Instituto está muy comprometido en la lucha contra la violencia desplegada a la mujer. En estos momentos hemos sido protagónicos en el sentido de denunciar cómo la violencia hacia la mujer ha aumentado en Colombia, cómo se ha diversificado de muchas maneras esta violencia', señaló Carlos Valdés, en el lanzamiento del observatorio.
El centro de análisis se crea –según Carlos Valdés–, porque en la historia de Colombia, relacionado con la violencia, 'siempre se ha negado que se vulneran a las mujeres y, por ende, no se visibiliza el fenómeno'.
'Cuando empezamos a visibilizarlo, debemos entender que a la mujer sí se le está violentando, hay que visibilizar la causas que generan ese fenómeno, los mecanismos que lo rodean. Es un compromiso de todos los colombianos, no se trata de la Gobernación, la universidad, el Instituto, es un compromiso de vivir en un ambiente de respeto hacia la mujer, pero nunca lo vamos a saber si no lo hacemos visibles, y eso se gana con el observatorio', explicó.
El secretario del Interior del Atlántico, Guillermo Polo, se mostró satisfecho con la creación del Observatorio, el cual se da a través de una resolución. 'Todo eso garantiza rigor científico, institucional, compromiso y sostenibilidad en el tiempo', añadió.
Polo Carbonell declaró que la información será analizada no solo desde el punto operativo y de concentración de eventos, sino de análisis de contexto de cada uno de los eventos para mejorar la política de prevención de violencia contra la mujer.
Cifras disminuyeron
María Isabel Smith Rovira, directora regional norte de Medicina Legal, enseñó las cifras de la violencia contra mujeres en el Atlántico y Barranquilla, en un comparativo entre enero y junio de 2016 y 2017 en todas sus modalidades como niñas y adolescentes, adulto mayor, pareja, entre otros familiares, interpersonal y delito sexual. (Ver infografía)
En ambos resultados se muestra una disminución del delito. Durante 2016, en el Atlántico se presentaron 2.943 casos, mientras que en este primer semestre se reportaron 2.744, para una disminución de 199 casos.
En Barranquilla, en 2016 se denunciaron 1.804 casos, y en los primeros seis meses de este año 1.694, para una disminución de 110.
'Las cifras en algunos casos han bajado, pero en las de delito sexual, que es delicado, aumentaron', precisó Smith Rovira.
Las causas
Según el Instituto de Medicina Legal, hay dos causas específicas que configuran la violencia contra la mujer: la intolerancia y los celos.
'La sociedad no tolera que la mujer tenga papeles protagónicos en la vida del país, ya sea política, económica, de trabajo, en la academia o en el hogar. Y los celos en un mundo machista que somete a la mujer y que no le permite su desarrollo íntegro', aseveró Carlos Valdés.
De igual modo, expresaron que la forma de violencia de hace 10 años no es la misma de ahora. 'Antes hacia la mujer se daba a través de mecanismos contundentes: patadas, puños o cachetadas. Hoy, el arma de fuego se da como el principal mecanismo violentador, seguido de los elementos contundentes y cortocontundentes', manifestaron.
Recolección de datos
El Observatorio recolectará los datos para los casos de la información que le suministren la Policía Nacional, Fiscalía y CTI. Entidades estatales, autoridades, asociaciones, agremiaciones, ONG, medios de comunicación, observatorios de violencia, centros de investigaciones y red de investigadores, también aportarán datos.
'Medicina Legal recolectará datos, pero con ayuda de otras instituciones se pueden encontrar más casos y formular verdaderas políticas públicas, tanto preventivas como correctivas para atender este fenómeno', sostuvo Valdés.
