Un sector del corregimiento de Santa Verónica, en jurisdicción del municipio de Juan de Acosta, pasó de ser un lugar tranquilo para descansar e ir de vacaciones a convertirse en una zona donde los servicios públicos como el agua y la luz son una necesidad. Por este motivo, algunos propietarios de cabañas e inmuebles de la zona vienen considerando mudarse y hasta vender sus pertenencias.
María Eulalia Arteta, residente de la zona, contó a EL HERALDO que la situación se viene presentando por fallas en el acueducto costero.
“Al principio el acueducto funcionaba bien, pero en los últimos meses comenzó a tener problemas con la presión hacia varios sectores del departamento y no tenemos suministro de agua por días; siempre está la excusa de que le falta mantenimiento o que se rompió una tubería, pero no puede haber un servicio tan deficiente y cobrar una tarifa tan cara como lo hacen”, declaró.
Agregó que “tenemos que recurrir a llenar baldes de agua para nuestras necesidades básicas cuando se va el líquido”.
Mientras tanto, Julio Delgado, otro residente de la zona, mencionó que “hay un problema de salubridad por las basuras que se acumulan en el sector, ya que los camiones recolectores no logran entrar a nuestra zona y ahora con la llegada de las lluvias el arroyo de Juan de Acosta trae de todo hacia nuestras propiedades”.