Las redes sociales han ayudado a conocer historias que de otra forma no se hubiera enterado; y algunas le pueden servir para estar atento en estas situaciones.
Una de esas tantas historias que se dan a conocer en TikTok, la narró una creadora de contenido llamada Antonia Mendoza.
Ella, en uno de sus videos, empezó a contar cómo un viaje con amigos y pareja, terminó siendo una pesadilla.
Le puede interesar: A una década sin Gabo, su legado se mantiene más vivo que nunca
Inició describiendo que en el año 2017 viajó con un grupo de amigos a las playas de Cartagena. Dos antes de que se devolvieran a su ciudad de origen Bogotá, pasó algo inesperado.
'Mi exnovio y sus amigos estaban jugando fútbol, mientras las chicas estábamos hablando, echando chisme, parchadas. Todo indica que en alguna de esas patadas mi novio de ese momento levantó un trozo de popo de un perro o un gato y ahí empezó todo', dijo Mendoza.
Manifestó en el video, que, su exnovio al final de ese día estaba desesperado porque le dolían los pies, y llegó a pensar que se trataba de un agua mala que había hecho contacto.
La creadora de contenido cuenta que se desplazaron hasta una droguería donde consiguieron una pomada que tranquilizó un poco los síntomas. Luego, se fueron a Bogotá, y ahí todos los que estuvieron en el viaje empezaron a experimentar dolencias en las extremidades inferiores.
Asimismo, la joven reveló que inicialmente sentía dolor y picazón, especialmente en las noches, cuando de repente empezó a notar pequeñas líneas rojas en sus pies, estos eran pequeñas larvas que se desplazaban desde sus dedos hacia las plantas.
'Eran larvas y el primero que empezó a sentirlas fue mi exnovio. Fue como si él pisara donde estaban los ‘huevitos’ de las larvas, ellas entraran a sus pies y empezaran a comérselo por dentro', relató.
Acudieron a un especialista y les revelaron qué tenían. 'Ahí nos explicaron que teníamos ‘larvas migrans’ en los pies, gusanos en los pies. Empezamos tratamiento, fueron semanas horribles, andábamos en crocs por toda Bogotá y lo que más impresión nos causaba era cuando el gusano amanecía en un lado y durante el día se desplazaba a otro lado. Pero bueno, ahí entendí que hay que andar con zapatos en la playa'.
Las larvas migrans son una infección causada por parásitos que afectan la piel de los seres humanos, señala la ‘Fundación iO’, una organización científica dedicada al estudio y control de las Enfermedades Infecciosas en el mundo, zoonosis emergentes y medicina tropical y del viajero.
'Estas larvas son generalmente de los géneros Ancylostoma y Uncinaria, que son parásitos intestinales de perros y gatos. Las larvas migrans cutáneas se adquieren cuando la piel entra en contacto con suelos o arenas contaminadas con heces de animales infectados. Las larvas penetran en la piel y se mueven a través de ella, provocando lesiones cutáneas con trayectos serpiginosos y muy pruriginosos', destaca la organización.




















