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Los óleos de la repisa se han secado sobre el lienzo, y la grandilocuencia del arte colombiano se ha suspendido sobre un legado. El fallecimiento de uno de los más grandes, el maestro Fernando Botero, no solo ha llenado de luto aquellos que profesan especial sensibilidad, sino a todos los que son capaces de referenciar el valor de su obra.

{"titulo":"Botero, un legado con un volumen inmenso","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/botero-un-legado-con-un-volumen-inmenso-1033861"}

El paso por la vida le permitió sumar 91 años el pasado abril, en los cuales se encargó de hacer a través de sus creaciones una expresión de reinterpretación de Colombia y el mundo. Y es que haciendo un uso magistral de su grandeza, era imposible que Botero pasara ante la crítica como imperceptible.

Aunque sus primeros estudios los hizo en la Universidad de Antioquia en su natal Medellín, el maestro tuvo luego la oportunidad de viajar a España, donde estudió a grandes pintores de la talla de Goya y Velázquez.

Sus primeras obras fueron retratos, paisajes y escenas costumbristas, las cuales fueron realizadas con una pincelada muy suelta, casi que libre, y daba la impresión de ir empastando progresivamente.

{"titulo":"Juanes, Carlos Vives y J Balvin lamentan la muerte de Fernando Botero","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/fernando-botero-juanes-carlos-vives-y-j-balvin-lamentan-la-muerte-del-artista-1033771"}

Para este momento de la historia ya había comenzado a explorar con la amplitud de la formas, de hecho muchos de sus estudios asumen al paisa como el reinterprete de la belleza, basado en el balance de la estética simétrica y en redondez.

Sin embargo, aunque se cree que el concepto de volumen lo toma de esta escuela europea, el mismo Botero plantea que el manejo de la hinchazón y la grandilocuencia de sus obras los descubre en América.

Mientras pintaba una mandolina y el hueco de la caja de resonancia del instrumento, lo pintó muy pequeño y eso hizo que la visión del cuadro diera la sensación de volumen que se convirtió en el diferencial en su trabajo.

Un legado universal

Botero devela valores que solo podría haber mostrado él, y es la visión fresca de un arte que partiera de las bases sociales de un continente en desarrollo.

En entrevista con EL HERALDO, Cristian Padilla, historiador de arte y experto en la obra de Botero comentó sobre esto.

'Sin duda el legado que deja Fernando es la apertura del arte colombiano y latinoamericano al mundo. Hace parte de una generación de genios que se suman a la revolución cultural de México y llegan al Museo de Arte Moderno de Nueva York haciendo obras con identidad'.

{"titulo":"Paloma de la Paz y Madre Superiora, legado de Botero para la Casa de Nariño","enlace":"https://www.elheraldo.co/colombia/paloma-de-la-paz-y-madre-superiora-legado-de-botero-para-la-casa-de-narino-1033737"}

Botero es un artista que empieza su producción hacia finales de los años 40, cuando todavía hay un auge tremendo del muralismo mexicano. Y él se siente identificado con ese periodo, con lo que está ocurriendo, con esa revolución cultural encabezada por México.

'En su obra los hombres latinoamericanos fueron los protagonistas de una nueva fantasía, fue como muy inspirador para jóvenes artistas como Botero en ese momento. Y, por lo tanto, digamos que el volumen surge de ahí'.

Los artistas del Muralismo mexicano creían que para reivindicar, había que monumentalizar a Botero. Además, el hombre indígena y de campo poseen una fisonomía y unas formas en el cuerpo que son particulares y que se buscaban expresar.

'Otro de los legados que Botero deja es la generosidad, siempre estuvo muy preocupado por educar en el arte y la forma en la que consideró pertinente hacerlo fue por medio del arte donando obras a las colecciones de museos para que fueran visitados'.

La belleza de la violencia

A su turno, María Paz Gaviria, directora de ArtBo, comentó que es imposible hablar de los grandes referentes de las artes plásticas sin mencionar a Botero y que su legado trasciende fronteras.

'El trabajo de Botero siempre ha sido conmovedor, esa representación de lo irrisorio de la vida humana, que no se queda en la ironía, sino que también nos conmueve, su expresión barroca que nos permite oscilar entre emociones profundas y otras más simples, su representación de la belleza a través de la violencia y de la violencia a través de la belleza, esto sin duda es lo que lo hace más grande'.

{"titulo":"Medellín expresa su amor a Botero con un homenaje en su emblemática plaza","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/medellin-expresa-su-amor-botero-con-un-homenaje-en-su-emblematica-plaza-1033809"}

A propósito de esto último, también es preciso mencionar que en la historia la vocación artística de Fernando muta, y se direcciona a las orillas que lo necesitan, es decir, la conjugación de lo noble y bello se transforma por ocasiones en gritos sociales de justicia.

Asimismo, el dolor, el goce, la belleza y la violencia expresados en sus obras les hablan a lo más intrínseco del ser humano, hablan a todos, sin olvidar su lugar de enunciación, Colombia.

'El maestro además fue fundamental en fomentar el acceso del público al arte en el país. Él enriqueció el patrimonio cultural de la nación a través de las donaciones de obras de grandes maestros internacionales y de sus propios trabajos que hizo a las colecciones museológicas'.

Interpretación de la violencia

Camilo Castaño, curador del Museo de Antioquia, comentó que el legado de Botero se basó en comprender el alma latinoamericana desde la modernidad y el arte mismo.

'El mayor esfuerzo del maestro fue reescribir la historia del arte europeo que se nos mostró como universal, pero él la convierte en algo propio, en el cual se crea una apropiación desde la resignificación de la diversidad'.

Asimismo, el experto señala que el arte del maestro sufre una serie de quiebre, en el que no solo retrata la belleza, la simpleza y la cotidianidad, sino que también incluye la violencia como parte de su narrativa.

{"titulo":"Gobierno decreta tres días de luto nacional por la muerte de Fernando Botero","enlace":"https://www.elheraldo.co/colombia/muerte-de-botero-gobierno-decreta-tres-dias-de-luto-nacional-1033859"}

'Botero ha sido de los más generosos con su arte, donando obras para el museo y las ciudades, sin embargo, de aquella época tan difícil en los 90’ una de sus obras estuvo en medio de un atentado y desde ahí comenzó a pintar sobre la violencia'.

A esto se le atribuye su sensibilidad, indiscutiblemente a través de su arte, el maestro quería cambiar parte de la historia, pero tampoco podía obviar, es por ello que la narrativa de la violencia, el campesinado, y los territorios cercanos a la conmoción.

'Con la violencia en Colombia Botero abrió un capítulo distinto en su proyección artística que permite romper una cosa que él tenía y era no abordar esos temas, pintar solo los aspectos más amables de la vida, sino también lo poco agradable que también es muestra de arte que también habla de la colombianidad'.

Adiós al gran maestro de la pintura, la escultura y el dibujo, Colombia llora a Fernando Botero.

Botero y el Caribe colombiano

Botero ha retratado numerosos aspectos de la vida caribeña en su estilo único. Sus pinturas y esculturas a menudo representan escenas de la vida cotidiana en los pueblos costeros, donde la música, la danza y la alegría son elementos centrales. Sus personajes inflados parecen irradiar vitalidad y energía, capturando la atmósfera efervescente de la región.

Con el tiempo también hubo otras obras inspiradas en la región, una de ellas es ‘Masacre en Colombia’, este cuadro se exhibió por primera vez en el 2000 y narra a través del volumen de los personajes uno de los episodios de violencia más devastadores para el país, la Masacre de las bananeras.

Susana Bacca, curadora del Museo de Arte Moderno de Barranquilla (MAMB), dijo que: 'Otro dato importante es que en esta misma época se estaba desarrollando el sentir latinoamericano con producciones artísticas de escenas cotidianas en obras como ‘El ladrón’, ‘Historias sacras’ y ‘El milagro de la niña devorada por un colibrí’'. Este último, hace parte de las primeras obras del maestro, sino que también es de la colección del museo. Uno de sus rastros en la ciudad.