En la mañana de este viernes 15 de septiembre se confirmó el fallecimiento del maestro del arte en Colombia Fernando Botero a sus 91 años. El pintor y escultor antioqueño presentó quebrantos de salud en días anteriores y murió por una grave neumonía.
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Su hija Lina Botero, en declaraciones a Caracol Radio, explicó que falleció en Mónaco esta mañana: 'Llevaba cinco días bastante delicado de salud porque había desarrollado una neumonía'.
'Murió con 91 años, tuvo una vida extraordinaria y se fue en el momento indicado', expresó su hija, conmocionada, que le recordó como una persona 'que dedicó su vida a su país, que fue el tema de su obra artística'.
El artista Fernando Botero nació en Medellín el 19 de abril de 1932 y fue criado en el barrio Boston. Sus padres fueron David Botero, un arriero y comerciante, y Flor Angulo, ama de casa y costurera.
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Se casó con Gloria Zea en 1954, con quien tuvo tres hijos: Fernando Botero Zea, Lina Botero Zea, Juan Carlos Botero Zea. Luego en 1964, Botero se casó con Cecilia Zambrano, con quien tuvo un hijo, Pedro. En 1978, Botero se casó con la artista griega Sophia Vari. Vivieron en París hasta su muerte.
Desde muy pequeño expresó su amor por la tauromaquia e intentó practicar en una escuela para convertirse en torero; sin embargo, su pasión se esfumó cuando vio un novillo por primera vez.
Terminado su bachillerato viajó a Bogotá, donde tiempo después obtendría el segundo puesto en el IX Salón Nacional de Artistas y empezó a trazar su camino por mundo de arte hasta convertirse en un verdadero icono de la cultura en Colombia con su particular forma de plasmar su realidad.
Botero mostró un mundo mágico creado a partir de sus figuras voluminosas y colores vivos. Fue un artista de múltiples facetas, interesado, al tiempo, en la tradición latinoamericana y la historia del arte europeo.
{"titulo":"Luto en el arte: personalidades despiden al maestro Fernando Botero","enlace":"https://www.elheraldo.co/cultura/muere-fernando-botero-los-91-anos-este-viernes-15-de-septiembre-personalidades-del-mundo-lo"}
El pintor estudió en Colombia y en la Real Academia de Arte de San Fernando, en Madrid.
A los 19 años, expuso en Bogotá en la galería Leo Matiz. Luego volvió a presentar sus cuadros, y se vendieron todos, pero además se ganó un premio nacional de pintura, el cual le cambio la vida, pues con los dólares que se ganó logró viajar a España, más exactamente a Madrid en 1952.
Tras tener su estilo marcado, el cual descubrió viviendo en México, en 1956, cuando dibujaba una mandolina. 'La mandolina multiplicó su tamaño y las proporciones sufrieron un cambio radical', dijo en su momento su hijo Juan Carlos Botero.
Vivió un año en México y en 1958 se fue a Estados Unidos y empezó a exponer en la década de 1960 en Estados Unidos, con una primera muestra en el Milwaukee Art Center donde comenzó a mostrar su característico estilo figurativo.
Pero no todo fue tan fácil, pues de acuerdo con la crítica de arte Ana María Escallón, el pintor colombiano llegó a Nueva York solo con 200 dólares, y para sobrevivir, vendía sus cuadros en el Greenwich Village.
{"titulo":"Fernando Botero y el eterno legado que deja al arte moderno colombiano ","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/fernando-botero-y-el-legado-que-deja-al-arte-moderno-colombiano-1033599"}
La suerte cambiaría para Botero, pues gracias a Dietrich Malov, el director del Museo Alemán, quien se enamoró de su arte le dio un espaldarazo y se lo llevó al extranjero y logrando realizar cinco exposiciones.
Además, entre pinturas y esculturas, reconocibles al instante, han sido exhibidas en museos y galerías de todo el mundo, desde el Museo de Arte Moderno de Nueva York hasta el Museo Botero en Bogotá.
Solía ser llamado el artista de ‘las gordas’; sin embargo, en muchas ocasiones refutó esta referencia.
'En la pintura siempre hay una exaltación de algunos de aspectos. En la obra de Van Gogh, por ejemplo, era el color, en el mío es el volumen ... No me creen que no he pintado una gorda en mi vida. El volumen se lo aplico a todo, aplico la redondez a todo. Mis obras son sensuales', dijo en su momento.
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Su trabajó ha demostrado que el arte puede ser accesible y comprensible para todos, independientemente de su formación artística. Además, su compromiso con temas sociales y políticos a lo largo de su carrera ha llevado a reflexiones profundas sobre cuestiones como la desigualdad, la opresión y la belleza en todas sus formas.
El legado de Botero también se extiende al ámbito de la educación artística. A lo largo de su carrera, ha donado una parte significativa de su obra a museos y universidades, lo que ha permitido a estudiantes y amantes del arte de todo el mundo estudiar y apreciar su trabajo de cerca.
En 2016, el maestro Fernando Botero fue el primer artista en exponer en el paseo marítimo de la zona de Central de Hong Kong, uno de los puntos neurálgicos de la ciudad, al pie de sus rascacielos más famosos.
{"titulo":"Fernando Botero y el Caribe colombiano: el arte en reflexión ","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/fernando-botero-y-el-caribe-colombiano-el-arte-en-reflexion-1033609"}
Obras en todo el mundo
Consciente de la importancia de su obra, Botero donó gran parte de sus trabajos a su país natal y piezas suyas están repartidas entre el Museo Botero, en la capital colombiana; la Plaza Botero (Medellín), la Plaza Santo Domingo (Cartagena) o en la Casa de Nariño, el palacio presidencial, donde reposan la escultura 'La paloma de la paz' y la pintura monumental 'La monja'.
El Museo Botero, que guarda la colección más completa de su obra, fue creado en 1998 con la donación que hizo al Banco de la República de 123 obras de su autoría y 87 de artistas internacionales.
Botero ganó numerosos reconocimientos internacionales, entre los cuales destaca el premio Guggenheim International en 1957, que le supuso exponer en el Guggenheim Museum de Nueva York y ya hacerse un nombre internacional.
Entre sus distinciones figuran también la Orden de Andrés Bello (1976), la Cruz de Plata de la Orden Boyacá (1977), la Legión de Honor francesa (2002), el Premio Américas (2002), la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica (2007) y el título de Embajador honorario de Colombia ante la Unesco.
{"titulo":"Fernando Botero, un ilustre que habitó en Santiago de Tolú","enlace":"https://www.elheraldo.co/sucre/fernando-botero-un-ilustre-que-habito-en-santiago-de-tolu-1033631"}
Otro hito en su trayectoria fue 1961, cuando el MoMa de Nueva York adquirió 'La Mona Lisa de doce años'.
En 1969 realizó su primera gran exposición en la galería Claude Bernard de París y en 1972 en la Marlborough Gallery de Nueva York. Al año siguiente se trasladó a París, donde realizó sus primeras esculturas, que mostró por primera vez en la Feria de Arte de la capital francesa.
En abril de 2022 su natal Medellín le celebró por todo lo alto sus 90 años como un gesto de gratitud por iluminar con sus obras a una ciudad que estuvo en tinieblas por la violencia del narcotráfico.
{"titulo":"El cuento de Gabriel García Márquez que ilustró Fernando Botero","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/el-cuento-de-gabriel-garcia-marquez-que-ilustro-fernando-botero-1033653"}
'El maestro Fernando Botero no solamente ha sido para Medellín un artista vital, hijo de esta tierra, sino que también ha sido un gestor y un visionario', expresó en esa ocasión a EFE la directora del Museo de Antioquia, María del Rosario Escobar, quien agregó: 'le debemos la mejor cara de Colombia'.
Sus obras han protagonizado millonarias subastas, como en 2022, cuando la escultura 'Hombre a caballo' logra en Christie's 4,3 millones de dólares.
Botero se casó tres veces. Su primera mujer fue Gloria Zea, entre 1955 y 1960, y tuvieron tres hijos. En 1964 contrajo matrimonio con Cecilia Zambrano, con la que tuvo a su cuarto hijo, Pedrito (1970-1974) y se divorciaron en 1975. Desde 1978 estaba casado con la pintora y diseñadora de joyas de origen griego Sofía Vari, quien falleció en mayo de este año.
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