Una completa tragedia vive una familia kankuama, del corregimiento de Chemesquemena, municipio de Valledupar, debido a que un niño de 10 meses de nacido y que el 20 de octubre próximo cumplía, un año, murió al sufrir graves quemaduras de segundo y tercer grado en su cuerpo.
Todo sucedió la noche del pasado miércoles 27 de agosto cuando en el pueblo no había servicio eléctrico, por lo cual su madre prendió una vela sobre una pequeña mesa, al lado de la cama donde dormía el bebé.
Debido a que el niño estaba presentando problemas estomacales, la mujer salió a comprar más pañales en la tienda y dejó al niño dormido y en la vivienda quedó su otro hijo de 8 años.
De manera inexplicable para la hoy angustiada mujer, todos los objetos alrededor de la mesa donde estaba puesta la vela se prendieron fuego y seguidamente la cama donde estaba el niño. Cuando regresó de la tienda encontró al niño de 8 años llorando diciendo que su hermano estaba dentro.

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En ese momento todo se volvió en confusión y el padre de los niños llegó desde otra vivienda y logró sacar al bebé, y con la ayuda de un vecino lograron trasladarlo hasta el puesto de salud del Hospital Eduardo Arredondo Daza, del corregimiento de Patillal, el cual funciona con urgencia 24 horas, ya que en Chemesquemena solo tienen atención de prevención.
Por la gravedad de las lesiones el niño fue trasladado de inmediato al Hospital Rosario Pumarejo de López, de Valledupar, donde no fue recibido por no contar con una unidad para quemados y posteriormente remitido a la clínica Médicos, donde falleció la madrugada de este jueves 28.
Liseth Maestre, coordinadora de salud del pueblo Kankuamo, indicó que le están brindando acompañamiento a los familiares del menor en todo lo que sea necesario; mientras que en Medicina Legal adelantan la necropsia de rigor y trasladar el cuerpo del bebé nuevamente a Chemesquemena donde será sepultado.
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“Estamos esperando el dictamen de Medicina Legal, pero para garantizar la vida de la gente debemos tener dotados unos puestos de salud para atender todas las urgencias para que se les pueda hacer más fácil, las personas en los territorios tienen la dificultad que no todos tienen transporte para trasladarse, en el momentos de los hechos no había luz y tampoco señal no teníamos como buscar ayuda, un vecino fue el que prestó la ayuda, pero eso no es todo el tiempo”, indicó Liseth Maestre.
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