En la sede del Instituto de Medicina Legal volvió hablar Manuel Domínguez De la Rosa sobre el atentado criminal en el que perdió la vida su hijo menor, Manuel Domínguez De Hoyos, ocurrida en la noche del sábado 21 de octubre en el sector de Los Ciruelos, en el municipio de Malambo.
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El menor Manuel Antonio, de tan solo 16 años, fue una de las tres víctimas mortales de esta masacre que, según las autoridades, se atribuye a la sangrienta guerra entre Digno Palomino y Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, por el control de microtráfico en Barranquilla y su área metropolitana. Las otras dos víctimas mortales fueron Jefferson Jesús Chirinos Vera, de 24 años y de oficio reciclador, y Luis Miguel Narváez Suarez, quien solo hasta este lunes se identificó.
Entretanto las tres personas que resultaron lesionadas fueron identificadas como Juan Camilo Martínez Barreto, de 18 años; María Jesús Moreno Sandoval, de 71 años, y William Andrés Carrillo Fontalvo, de 30 años.
Frente al hecho, el progenitor del adolescente expresó que su hijo se cambió hacia las 9:30 de la noche para asistir al quinceañero que se celebraba en cercanía de la calle 13A con carrera 1 Sur, adonde sucedió el ataque.
'Manuel me dijo: papá, yo voy un rato y me vengo como a la 1:00, porque mañana juego fútbol. A lo que yo le contesté: no te vengas solo, busca con quién venirte de allá. Tengo entendido que de camino a la fiesta se encontró con un compañero en la casa del ataque y se puso a esperarlo. Ahí le dieron los tiros', comunicó Domínguez De la Rosa.
{"titulo":"Identifican a víctimas de la masacre en Los Ciruelos de Malambo","enlace":"https://www.elheraldo.co/judicial/identifican-victimas-del-ataque-sicarial-en-el-barrio-los-ciruelos-de-malambo-atlantico"}
Esa versión del progenitor también coincidió con una entregada por habitantes del sector, quienes expresaron que Manuel Antonio fue tiroteado afuera de la casa y sucedió cuando el criminal iba a abordar la motocicleta de color blanco que era conducida por su cómplice.
El padre de la víctima también catalogó a su hijo como una promesa del fútbol y que su meta era llegar al profesionalismo. 'Mi hijo jugaba como delantero en el equipo Boca Juniors de Soledad y tenía su propio estilo. Era solo un niño futbolista', expresó Domínguez con la voz quebrada.
