* Por Hellen Benavides
Mario Benedetti permitió que el amor abrazara cada fibra de su piel en su ejercicio como poeta; su pluma fue guiada por ese sentimiento que suelen experimentar la mayoría de los humanos. 'Enamorarse es un presagio gratis, una ventana abierta al árbol nuevo, una proeza de los sentimientos, una bonanza casi insoportable y un ejercicio contra el infortunio'. ¿Alguien pensaría que no es producto del amor este verso de Enamorarse y no?
Este sentimiento ha inspirado muchas vidas a lo largo del tiempo y por lo tanto pocos pueden escapar de él.
'(…) A Beatriz no se la elige, a Julieta no se la elige. Vos no elegís la lluvia que te va a calar hasta los huesos cuando salís de un concierto', escribió Julio Cortázar en Rayuela, en la que expone que el amor no se escoge, sin embargo hoy la internet permite que muchos cibernautas se conecten por medio de páginas web, redes sociales o aplicaciones de citas y con un solo clic seleccionen 'el amor', y con todas las especificaciones que deseen.
Antes, encontrar a la pareja ideal de esta forma era una utopía. Hoy, historias reales como la de Anna y Alejandra, que se conocieron en Tinder, al igual que la de María y Adam, la de Luz y Juan, que se conocieron por una página de citas, y la de Julieth y César, quienes también se conocieron por un plataforma web, contradicen aquella creencia. Es relevante mencionar que no todas las personas que hacen uso de estas herramientas están en búsqueda de una relación formal, sin embargo los que sí están interesados se dejan seducir por el amor.
Tenga en cuenta estas recomendaciones si busca una relación estable en internet:
- Construir un perfil que especifique que busca una relación estable.
- Analizar en detalle el perfil de la persona de su interés: la descripción de su biografía, publicaciones, fotos y demás.
- Hablar por varios días con la persona elegida para ir conociendo su forma de ser.
- A la hora de la primera cita escoger un lugar concurrido.
Así se enamoraron las youtubers Alejandra y Anna
Alejandra Guánchez (32 años) y Anna Pulgarín (24 años) se conocieron a través de la aplicación Tinder. Ambas son de Medellín. La primera está dedicada a las comunicaciones visuales y marketing digital desde hace cinco años; y Anna, que se considera una persona creativa, pinta y trabaja en un reconocido café en su ciudad natal.
Cuentan que el año pasado se aventuraron a dar el paso virtual sin estar buscando un compromiso, pero luego entablaron una relación estable y presencial. Anna explica que iniciaron como muy buenas amigas, ya que ella tenía novio, pero luego de una ruptura inesperada decidieron conocerse y hoy en día están comprometidas. 'Es una historia muy bonita, yo me siento orgullosa de cómo sucedieron las cosas con Anna, ha sido el amor más puro que he sentido por alguien', cuenta Alejandra.
Ambas tienen un canal en Youtube llamado ‘Cual pingüinos’ que cuenta con 7.803 suscriptores y que se inició luego de empezar la relación con la idea de generar contenido incluyente y derrumbar mitos alrededor de la comunidad LGTBI.
Un amor que llegó después de los sesenta años
Luz Marina Jabba, una mujer barranquillera de 62 años y con tres hijos, conoció en 2007, a través de una página web llamada ‘Elplanazo’, a Juan Vega, quien es hoy su esposo.
Luz viajó a España en 2013 a conocerlo personalmente y en ese país contrajeron matrimonio el año pasado.
'Me fui a España a ser feliz', relata emocionada.
También cuenta que uno de sus hijos fue la persona encargada de enseñarle a usar la computadora, ya que ella, en su momento, era una novata cibernauta. Hoy en día se encuentra en Málaga al lado de su esposo y recuerda la historia que los unió.
Costamigos los llevó al matrimonio
‘Costamigos.com’ (actualmente no disponible en internet) fue la página en la que se conocieron Julieth y César, dos barranquilleros que por timidez optaron por esta forma de encontrar el amor. Un domingo en la iglesia San Francisco, frente al cuadro del Señor de los Milagros, se citaron para conocerse personalmente luego de haber estado hablando por chat. Llevan once años juntos: tres de novios y ocho de casados, y tienen a Valentina y Valeria como fruto de su amor.
Romance al otro lado del mar
'Adam, quién es ahora mi novio, tenía Tinder Plus, y desde Inglaterra estaba buscando match (compatibilidad) en Colombia. Él venía a estudiar español y un mes antes de su arribo empezamos a hablar por chat. Cuando llegó a este país nos encontramos en Cartagena', cuenta María, quién lleva un año y cuatro meses de relación con el director ejecutivo de una empresa de marketing digital en Londres. 'Tenemos una relación a distancia que es muy fuerte, tratamos de vernos cada dos meses'. María viajará en noviembre a la capital de Inglaterra y Reino Unido para radicarse en esa ciudad al lado de Adam.
