Los aplausos entusiastas resonaron durante varios minutos tras el show de la holandesa Iris Van Herpen en un circo parisino en el que el público asistió a un desfile de fantasía, acompañado de un espectacular concierto de unos músicos sumergidos en enormes peceras, tocando instrumentos y cantando bajo el agua, asomando la cabeza solo para respirar.
Van Herpen explicó haber conocido a este grupo de artistas daneses, llamado Between Music, que 'durante una década desarrolló una técnica submarina para cantar y tocar música'.
'Me sentí muy inspirada por ese proceso y empecé a colaborar con ellos. Literalmente, me sumergí en los elementos del agua y el aire'.
El resultado –combinando la confección manual con la alta tecnología– son unos vestidos de noche largos, brillantes y seductores, que las modelos lucían cual escamas, haciendo de ellas bellas sirenas.
'La fluidez es muy importante pero también la forma en que los tejidos pueden fluir del blanco al negro, algo que me parece una bella cualidad del agua', dijo Van Herpen, cuya firma cumple ahora su primera década.





















