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La compañía venezolana Monómeros, que hace parte de la empresa Pequiven, la filial de petroquímica de Pdvsa que está bajo el control del gobierno de Nicolás Maduro y que tiene su sede en la ciudad de Barranquilla, ha sido durante sus 57 años un aliado clave del sector agropecuario en Colombia. Sin embargo, la compañía se encuentra a la deriva por varios factores que aún no tienen respuesta.

El primer obstáculo es que todavía no se sabe si el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos le va a prorrogar el permiso que tiene para realizar transacciones comerciales. Para ser preciso, la licencia Ofac para Monómeros.

Se refiere a una autorización emitida por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (Ofac) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos que le permite a dicha empresa realizar ciertas transacciones y operaciones que de otro modo estarían restringidas debido a sanciones económicas. Esta licencia es crucial para que Monómeros pueda seguir funcionando y realizando actividades comerciales esenciales, especialmente en el contexto de las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos.

Lo otro tiene que ver con la decisión de la Superintendencia de Sociedades de colocar a Monómeros en máximo grado de supervisión, denominado “control”, lo cual no implica que el organismo pueda tomar posesión sobre esta, pero sí permite promover la presentación de planes y programas de mejoramiento, como también convocar a la sociedad a un proceso de insolvencia.

“La decisión se adoptó con fin preventivo, a efectos de preservar la empresa como unidad productiva y fuente generadora de empleo, ante la situación financiera que presenta oportunidades de mejora en cuanto a sus fuentes de financiación, disminución de ingresos, flujo de caja, entre otros”, señaló el ente de control en su momento.

Y lo otro que no ha tenido futuro alguno es la intención tanto del Gobierno nacional como de la empresa Nitrofert de comprar la compañía. Hay que aclarar que no hay una información pública disponible y final sobre el precio actual de Monómeros Colombo Venezolanos; sin embargo, cuando Armando Benedetti fue embajador de Colombia en Venezuela se habló de una posible compra, por medio de Ecopetrol, que rondaría los USD300 millones.

“Creemos que esa empresa, bien dirigida, puede ser más rentable que la misma Ecopetrol. Tenemos que ‘jugárnosla’ toda con esa compra antes de que agremiaciones de agricultores privados la compren”, indicó Benedetti en marzo de 2023.

Luego, el presidente Gustavo Petro dijo durante esta semana en un consejo de ministros que “Monómeros debe ser colombiana para abaratar los precios de los alimentos en el país”.

Y también hay que recordar que el pasado 15 de enero de 2025, en diálogo con EL HERALDO el CEO de Nitrofert, Jorge Pacheco, le dijo a EL HERALDO que había en su momento una debida diligencia de estudios para analizar las posibilidades jurídicas, técnicas, productivas y financieras que permita realizar la adquisición de ciertos activos tangibles e intangibles de la petroquímica venezolana.

En ese sentido, agregó que esta compra sería muy positiva para el agro colombiano, puesto que la compañía Nitrofert es la única en el mercado con la posibilidad de una sobreinstalación de producción. “En este momento en nuestras plantas podemos hacer la operatividad directa del volumen que atiende Monómeros en este momento, podemos retener al equipo, al talento humano que tiene la compañía, absorberlo por completo y poder así darle la satisfacción del abastecimiento tan necesario para el agro colombiano”.

Sin embargo, este medio intentó nuevamente contactarse con esta empresa para preguntar sobre la evolución de las negociaciones, pero no se encontró respuesta alguna.

Respuesta de Monómeros

El gerente de esta compañía, Iván Sánchez, aseguró que, más allá de que no se ha dado una señal por parte de los Estados Unidos sobre la licencia Ofac, Monómeros ha cumplido sus obligaciones de manera eficiente, categórica y transparente, no solamente para que les sea nuevamente otorgada esta licencia, sino también con todas las instituciones de Colombia.

“Es un trabajo y un esfuerzo, así que estamos a la espera de tener unos buenos resultados, y si no los tuviéramos, creéme, que si trabajamos cinco veces con licencia, sin licencia trabajaríamos 10 y 20 veces más, porque el espíritu que nace de Monómeros es indestructible”, manifestó el gerente de la empresa venezolana con sede en Barranquilla.

Sobre el tema de fertilizantes

El presidente Gustavo Petro había señalado que se logró bajar el precio de fertilizantes cuando subía en el mundo por Monómeros. “Y ahora quieren subir (...) y quitar (...) Monómeros porque es una empresa venezolana, y nos va a fregar es la agricultura colombiana, y eso no podemos permitirlo”, dijo el mandatario.

Y agregó: “Subsidiamos fertilizantes porque es la alimentación del pueblo, y si la comida es más barata hay menos hambre, tema de este programa, pero también hay que asumir la industrialización de la producción agraria”.

Precisamente sobre esto, el presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), Jorge Bedoya, le expresó a EL HERALDO que los precios de los fertilizantes habían presentado una reducción después de lo más fuerte que se presentó y fue el inicio de la invasión de Rusia a Ucrania, y volvieron a niveles que permitieron darle oxígeno al sector agropecuario no solo a Colombia, sino al mundo.

“Recientemente con esto que ocurrió entre Irán y Estados Unidos, comenzaron a incrementarse los precios por la tensión, pero en todo ese periodo de tiempo se mantuvieron en una relativa tendencia a la baja y algo de estabilidad. Eso para nada tiene que ver con la situación de Monómeros”, puntualizó Bedoya.

En ese sentido, agregó que “al final del día, Colombia no solamente importa prácticamente la totalidad de los fertilizantes que se consumen, sino que hay muchas empresas en el mercado colombiano, y Monómeros no es la que tiene la mayor participación en el mercado nacional”.

“Desde el punto de vista para abaratar los precios, se sabe que esto se rige es por oferta y demanda, y cuando uno mira el comportamiento del Índice de Precios al Consumidor (IPC), gracias al esfuerzo que han hecho los productores, a la renovación de plantación en cultivos permanentes, a la buena programación que han tenido los productos pecuarios, y también con la fortuna de los precios de los insumos, como en el caso de los fertilizantes, pues eso ha contribuido a que haya un crecimiento de la oferta relativo a la demanda, por eso se ha visto una reducción por lo menos en gran parte del año 2025 comparado con el 2024 en el IPC de los alimentos”, sostuvo el presidente de la SAC.

La importancia

El excongresista César Lorduy, quien conoce a fondo la empresa Monómeros, sostuvo que esta es una empresa colombiana, pero ante todo es un activo de Barranquilla.

“Es un activo en donde se forman y se han formado por décadas profesionales de excelencia, que con posterioridad le han prestado sus servicios a Barranquilla y al país desde diferentes escenarios. Monómeros presenta un porcentaje importantísimo en el mercado de los fertilizantes que, en el caso de no producirse, seguramente será sustituido con importaciones. El solo hecho de que se sustituya por importaciones trae como consecuencia la pérdida de empleos. Cualquier restricción que se imponga en la cadena aumentará el precio en la agricultura y en todos los alimentos”, dijo Lorduy.