Todos los días Nelson Portillo destina $4.500 para comprar un ‘corrientazo’ de los que venden en un carrito que se ubica en una esquina cercana a su sitio de trabajo. Cuando recibe la caja de icopor que contiene arroz, carne, granos, ensalada y un banano, acompañada de sopa y jugo, sus ojos se iluminan: '¿Dónde voy a encontrar una comida en este precio?', dice antes de dar el primer bocado.
Es un trabajador como muchos en Barranquilla que gana un salario mínimo y busca la manera de ajustar su presupuesto sin sacrificar su alimentación.
'En otra parte un almuerzo me costaría unos $9.500 y aquí me ahorro $5.000, además la calidad es buenísima', afirma.
La realidad que vive Nelson diariamente la comparten 60 de cada 100 barranquilleros, que según datos de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) Atlántico compran almuerzos corrientes o ‘corrientazos’ como se les llama popularmente.
La información del gremio es respaldada por los resultados de la reciente Encuesta Nacional de Presupuesto de los Hogares que indican que los almuerzos completos, otro nombre rimbombante para el ‘corrientazo’, conforman el 62% de las compras de comidas preparadas fuera del hogar.
Además, el almuerzo completo hace parte del top 5 de artículos que pesan más en el gasto de los hogares, con un 3,2% ocupando el tercer puesto después de pago de vivienda propia (9%) y arriendo mensual de vivienda (5%). No en vano está dentro de los elementos que son considerados por el Dane para medir la inflación.
Almuerzo corriente, ejecutivo, especial o lunch, son algunos de los nombres que recibe esta comida, también su precio varía según el contenido, pero su característica principal es que contiene una proteína, arroz, granos y ensalada, sopa y bebida.
El director ejecutivo de Fenalco Atlántico, Héctor Carbonell, afirma que esta famosa alternativa se puede encontrar hoy hasta en forma de bufet.
'Lo encontramos en restaurantes y hasta en cadenas internacionales', señala. Los precios van desde $4.500 hasta $15.000 o $17.000 y están relacionados con la calidad y la cantidad de alimentos que incluyan, al igual que el lugar donde se compren.
'Desayunos también se mueven'
Magni Montero, directora ejecutiva de la Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica, Acodrés, capítulo Atlántico, asegura que otro de los momentos del día en que los barranquilleros han aumentado la demanda por las comidas preparadas, es la hora del desayuno.
La dirigente gremial explica que este servicio se está prestando cada vez en más establecimientos, ante la demanda de reuniones de trabajo que se hacen en las primeras horas del día, en los días de semana.
Por otra parte, los fines de semana la demanda de los desayunos tipo ‘brunch’ se ha incrementado, como plan familiar alterno a la tradicional preparación de la comida en los hogares.
Montero manifiesta que los restaurantes reportan aumento en la venta de almuerzos durante los fines de semana, especialmente los domingos y festivos.
En cuanto a la demanda de almuerzos corrientes, asegura que cada vez las personas optan por tomar los alimentos del mediodía cerca de su lugar de trabajo, como quiera que de esta manera ahorran tiempo y muchas veces hasta dinero.
Ante este panorama, el gremio de la industria gastronómica se muestra optimista frente a lo que puede ser el segundo semestre del año si continúa la tendencia al alza en el movimiento de las comidas en los restaurantes.





















