En un abrir y cerrar de ojos, cuando el rival menos lo espera... ¡Zas! Aparece Macnelly Torres con su mágica precisión y filtra el pase que gana un partido.
En su segundo ciclo con el Junior, el volante creativo barranquillero está demostrando que es un clarividente de caminos y atajos para inflar la red. Sabe sembrar, en medio de un bosque de piernas, múltiples opciones de gol.
El sábado anterior volvió a frotar la lámpara. Bajo su batuta los rojiblancos ofrecieron un recital de buen fútbol en el estadio Atanasio Girardot y se impusieron 2-1 al Medellín.
Llenó de luces el ataque. De nuevo alumbró la ruta hacia el gol de Vladimir Hernández, quien ha sido un buen socio en los recientes partidos en territorio antioqueño, en el 2-2 ante Nacional y el triunfo 2-1 ante el ‘Poderoso’ (ver recuadro)
'Es importante la victoria en Medellín, el equipo tuvo un rendimiento óptimo, fuimos superiores, hicimos un buen partido, creamos opciones y somos merecedores de este triunfo que nos coloca más cerca de la clasificación, el mérito es para todo el grupo', comentó Macnelly, considerado figura del juego por gran parte de la prensa.
'Hasta perdiendo el equipo tuvo un buen fútbol. En el segundo tiempo puso las ganas para voltear el marcador adverso', agregó el experimentado mediocampista barranquillero.
La estadística dice que apenas suma dos goles (ante Jaguares y Uniautónoma) y cinco asistencias en las 24 anotaciones que contabiliza Junior en la Liga Águila, pero la realidad, si analizamos las jugadas de cada uno de esos 24 tantos, es que el ‘10’ ha sido autor intelectual de, por lo menos, un par más.
En dos goles anotados por Yessy Mena y Roberto Ovelar casi en la raya, tras remates rasantes y cruzados de Jorge Aguirre, Macnelly fue el protagonista decisivo.
‘El Mago’ sacó de la galera dos buenos pases que dejaron al delantero paisa de cara al gol, pero acto seguido Ovelar y Mena se encargaron de garantizar la ‘diana’ y matar para la estadística el pase-gol.
Y si nos ponemos a incluir las oportunidades de anotar que se han despilfarrado, descubriríamos que Macnelly ha sido uno de los ‘damnificados’ para sus cifras personales de asistencias.
LO PIDEN PARA SELECCIÓN
En todo caso, es inocultable la positiva injerencia de Macnelly en la propuesta futbolística de Alexis Mendoza. Impone los ritmos, profundiza y organiza la ofensiva. Si se inspira, Junior garantizadas posibilidades de gol y victoria.
Ante su destacada campaña, que ha tenido unos pocos partidos sin brillo, muchos hinchas del Junior ya lo empezaron a pedir para la selección Colombia que jugará la Copa América.
'Yo trato de brindar mi fútbol al Junior, lo de la Selección puede que venga. Siempre debemos estar abiertos', dijo ‘El Mago’ del pase-gol.
Buen socio del 10
Vladimir Hernández ha sido el autor material de dos geniales pases de Macnelly Torres en los dos últimos partidos del Junior. El primero sirvió para empatar 2-2 ante Nacional y el segundo para vencer 2-1 al Medellín. Ambas asistencias se dieron con marcas encima.
'Macnelly siempre la pone ahí donde uno la pide. Estoy feliz, espero seguir aportándole al equipo', dijo Vladimir Hernández a Todelar.
Las cuatro razones del triunfazo en Medellín
El juego colectivo. Junior jugó de manera armónica y en equipo. Siempre procuró llegar a través del toque, sin aventuras individuales. Siempre se pensó en el compañero. Jugó con movilidad y salida de laterales. Existieron muchos puntos de apoyo mientras se avanzaba con el balón.
Varios se lucieron. La fortaleza colectiva fue más evidente a partir de altos rendimientos individuales como los de Viera, con varias atajadas cruciales; Iván Vélez, William Tesillo, Juan Guillermo Domínguez, Guillermo Celis, Macnelly, Vladimir Hernández, Jorge Aguirre y Roberto Ovelar.
Contundencia. Hace varios partidos que no se habla de opciones de gol desperdiciadas. Se ha contado con contundencia. El equipo aprovechó la mayoría de las ocasiones de gol que se le presentaron durante los dos últimos partidos, disputados en territorio antioqueño.
Estrategia. Los rojiblancos lograron controlar la propuesta ofensiva del Medellín. Pasaron algunos sofocos en el primer tiempo, pero pudieron emparejarle el trámite del juego y explotar los espacios que dejaba atrás. No se desesperaron con el gol en contra y atacaron.














