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El Lille, con un gol del canadiense Jonathan David, ganó en el Parque de los Príncipes al París Saint Germain, que perdió el liderato de la Ligue 1 de Francia, en manos ahora de su rival.

El duelo reflejó a un campeón impotente y sin recursos tal y como mostró la expulsión de Neymar, en el último minuto, por empujar a un rival cuando tenía tarjeta amarilla.

La relevancia del choque que reunió a los dos primeros clasificados, igualados a puntos antes del inicio, impidió que el técnico argentino Mauricio Pochettino reservara a alguno de sus principales jugadores para el encuentro de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones contra el Bayern Múnich.

Salió con todo el PSG

Con Neymar de titular por primera vez tras su lesión, Kylian Mbappe y el argentino Ángel Di María. También el italiano Moise Kean. El transalpino Marco Verratti, con coronavirus, fue baja en los locales.

El París Saint Germain, que sufrió su tercera derrota seguida como local, terminó desquiciado y sin recursos ante un adversario que supo jugar sus bazas y manejar el encuentro especialmente con el marcador a favor.

Fue a los veinte minutos cuando el conjunto de Christophe Galtier se puso por delante. Jonathan David recibió un balón de Nanitamo Ikoné y disparó. Su tiro fue desviado por el brasileño Marquinhos y superó al costarricense Keylor Navas.

Apretó el París Saint Germain que fue incapaz de marcar. Tras el descanso bajó su presión y el Lille estuvo más cómodo.

Neymar contra Djalo

El delantero brasileño Neymar y el defensa portugués Tiago Djalo se enzarzaron en el túnel de vestuarios tras ser expulsados en el tramo final del partido entre el París Saint Germain y el Lille, de la Ligue 1.

Ambos vieron la tarjeta roja en el minuto 89. El zaguero luso cometió una falta sobre el brasileño, que le propinó un empujón. Los dos ya estaban amonestados, por lo que fueron expulsados por el árbitro Benoit Bastien.

Cuando se adentraron en el túnel de vestuarios del Parque de los Príncipes, la disputa entre los jugadores continuó. Neymar, especialmente alterado, empujó a su rival. Ambos, protegidos por miembros de sus respectivos equipos, intercambiaron reproches, gritos e insultos.

En un momento, el brasileño aceleró en busca de Djalo, pero no le alcanzó. Tuvieron que ser separados. El portugués tropezó y cayó al suelo mientras Neymar enfilaba la puerta de su vestuario, donde prosiguió con los reproches a su rival antes de entrar.