En una jornada llena de emociones y muchas sorpresas, el colombiano Egan Bernal volvió a poner a soñar a los amantes del ciclismo colombiano con una de sus actuaciones más combativas desde su regreso al más alto nivel.
La etapa 9 del Giro de Italia 2025, marcada por el sterrato y los desniveles de la Toscana, se convirtió en escenario de una épica batalla ciclística que mantuvo en vilo a millones de aficionados.
Aunque Bernal, del equipo INEOS Grenadiers, no logró subir al podio de la fracción, su protagonismo en una valiente escapada lo consolidó como uno de los hombres más fuertes y estratégicos de esta edición de la ‘Corsa Rosa’.
Desde el primer sector de sterrato —el característico camino de tierra que rememora las clásicas italianas—, el equipo INEOS demostró tener un plan claro: agitar la carrera y posicionar a Bernal en la lucha por la general.
La estrategia dio resultados. Con un ataque certero, Egan logró desmarcarse del pelotón y abrir una brecha de más de un minuto frente al grupo donde rodaba el líder, el español Juan Ayuso (UAE Team Emirates).
La ambición del colombiano se notó desde el primer momento. Concentrado, sólido y decidido, Bernal rodó con el ímpetu de quien busca no solo una etapa, sino recuperar su lugar entre la élite del ciclismo mundial. Por momentos, parecía que la victoria podía teñirse de tricolor.
Rivales de peso en el camino
Pero el ciclismo es un deporte de resistencia y táctica, y en Monteaperti se impuso la ley del más fuerte en el momento clave. El mexicano Isaac del Toro —nuevo líder del Giro— y el belga Wout van Aert —finalmente ganador de la novena etapa—, dos talentos con sed de gloria, se encargaron de neutralizar los ataques del colombiano y lanzar su propia ofensiva en los últimos kilómetros.
El desgaste acumulado le pasó factura a Bernal, quien no pudo seguir el ritmo impuesto por Van Aert y Del Toro. Sin embargo, se mantuvo firme en el segundo grupo de perseguidores, trabajando codo a codo con el checo Mathias Vacek (Lidl-Trek) para minimizar las pérdidas.
Finalmente, Egan cruzó la meta en la novena posición, un resultado que, si bien no le otorgó el triunfo de etapa, sí lo catapultó al séptimo lugar en la clasificación general, a solo 1 minuto y 57 segundos del líder, el mexicano Isaac del Toro.
Con esta actuación, Bernal se consolidó como el mejor colombiano en competencia y reafirmó que su proceso de recuperación y retorno al protagonismo va por buen camino. El país ciclístico no solo celebra su forma, sino también su valentía para desafiar a los grandes nombres del pelotón internacional.
Los demás colombianos siguen luchando en posiciones más retrasadas:
Einer Rubio: puesto 15, a 3:34 del líder.
Nairo Quintana: puesto 27, a 7:57 del líder.
Brandon Rivera: puesto 41, a 21:13.
Daniel Felipe Martínez: puesto 63, a 37:30.
Lo que viene: una crono clave en la Toscana
La décima etapa del Giro se celebrará el próximo martes 20 de mayo, con una contrarreloj individual de 28.6 kilómetros entre Lucca y Pisa. Será una jornada decisiva para los aspirantes al título, y Bernal tendrá una nueva oportunidad para seguir escalando posiciones.
Colombia espera con ansias. La bicicleta de Egan, su motor interno y su corazón luchador tienen una cita con la historia.