Un lamentable hecho se presentó en el municipio de Buenaventura, en el Valle del Cauca, tras conocerse que presuntamente una pareja sometía a “maltrato físico, actos de tortura y servidumbre” a sus dos hijos de crianza.
Leer más: Habló dueño de tienda donde se compró arma con la que dispararon a Miguel Uribe: esto dijo
De acuerdo al reporte de las autoridades, la menor de 12 años terminó en el hospital debido a las fuertes golpizas. “El ciclo de violencia se habría extendido al hermano de la víctima, un niño de 10 años que también habría sido agredido”, añadió la Fiscalía.
“Una denuncia conocida el pasado 20 de febrero, permitió establecer que una menor de 12 años fue ingresada a una clínica del puerto con signos visibles de maltrato físico como hematomas, laceraciones en todo su cuerpo y cicatrices de heridas, causadas por golpes con objetos contundentes”, se lee en el comunicado.
Según la Fiscalía, los elementos materiales probatorios recopilados establecieron que la niña se encontraba a cargo de una mujer de 50 años y un hombre de 47, desde que tenía 6 años, y estas dos personas serían las responsables de las agresiones físicas de las que fue víctima.
Ver también: Suspenden licencias a cinco empresas de seguridad privada en Barranquilla por irregularidades operativas
Asimismo, el ente acusador señaló que ambos menores fueron acogidos por los presuntos agresores desde 2019, ya que no fueron adoptados formalmente, y desde ese entonces ya estarían recibiendo maltrato físico.
Además, la Fiscalía precisó que la mujer procesada era funcionaria pública para el momento en que se registraron los hechos.
“En ese sentido, una fiscal de la Seccional Valle del Cauca les imputó a los capturados los delitos de trata de personas para fines domésticos, tortura agravada, por tratarse de menores de edad, y violencia intrafamiliar”, añade el escrito.
Le sugerimos: Gaula recaptura a presunto autor de la masacre de Chimá cuando abandonaba La Tramacúa tras quedar en libertad
Los procesados no aceptaron los cargos y por disposición de una juez de control de garantías les fue impuesta medida de aseguramiento en establecimiento carcelario. Ambos fueron capturados en Cali por funcionarios del CTI y uniformados del Gaula.
Ahora los menores se encuentran bajo el amparo del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).