Uno de los escándalos judiciales más suscitados en el año 2017 fue la captura del entonces fiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno, quien fue condenado el pasado miércoles por la justicia estadounidense a cuatro años y 10 meses de prisión.
La noticia estalló el pasado 27 de junio de 2017, cuando Colombia se enteró que la persona encargada de investigar los procesos relacionados a los delitos económicos u otros cometidos por funcionarios públicos en el ejercicio de sus cargos por el fenómeno de la corrupción fue capturado, precisamente, por el delito de conspiración para lavar activos con el fin de promover sobornos y actos de corrupción.
El picaresco caso contempla una serie de declaraciones y actuaciones procesales que le abrieron camino al exfiscal anticorrupción en Estados Unidos y que terminó con una condena en ese país y una pena pendiente en Colombia de 58 meses de prisión inconmutables.
Enero de 2017
El 4 de julio de 2017 la Procuraduría abrió una investigación preliminar contra Moreno por los actos de corrupción de los que fue señalado. Al día siguiente, el fiscal Néstor Humberto Martínez dio su primera declaración sobre el caso, lo señaló de 'infiel a la confianza que se le brindó' y aseguró no haber 'contaminación' con otras investigaciones que se adelantaban en el bunker.
Una semana después, el 14 de julio, Moreno aceptó los delitos de concusión y utilización de información privilegiada que le imputó la Fiscalía.
Agosto de 2017
El 15 de agosto salió a flote el escándalo por el ‘Cartel de la toga’. La Corte Suprema denunció ante la Cámara a los exmagistrados Leonidas Bustos y Francisco Ricaurte por presuntos hechos de corrupción que comprometían al entonces abogado Luis Gustavo Moreno.
El 23 del mismo mes, Estados Unidos hizo la solicitud formal a la justicia colombiana de la entrega de Moreno para que respondiera ante la Corte de Florida por los delitos de lavado de dinero, conspiración para cometer fraude en giros bancarios y fraude bancario. Seguidamente, el 28 de agosto, la Corte Suprema de Justicia inició el proceso de extradición del exfiscal.
El 30 de agosto de 2017, la Fiscalía informó que Moreno sería imputado por el delito de costreñimiento, por el presunto caso de soborno denunciado por el senador Musa Besaile quien señaló que le habría pedido $6.000 millones para obstruir la supuesta orden de captura que pesaba en su contra por el caso de parapolítica.
Últimos meses del 2017
La Fiscalía dio a conocer que Luis Gustavo Moreno colaboraría con la justicia; pero que no tendría inmunidad. En tanto, la Procuraduría y la Corte avalaron la extradición del exfiscal anticorrupción. El 20 de octubre se empezaron a ventilar algunos nombres de dirigentes políticos como el de Musa Besaile, Álvaro Ashton y Hernán Andrade. El 26 de diciembre de 2017, el entonces presidente Juan Manuel Santos firmó la resolución de extradición del exfiscal Moreno a Estados Unidos.
Finalmente, luego de las dos veces que le negaron al exfiscal el preacuerdo que había hecho con el ente acusador, el 17 de mayo de 2018 un juez avaló el principio de oportunidad que buscaba Moreno. Al finalizar la diligencia, salió rumbo al aeropuerto de Catam donde lo esperaba un avión de la DEA.
Asilo en EEUU
David Weinstein, la defensa de Moreno, aseguró que su cliente pedirá asilo en Estados Unidos, justificando que su vida y la de su familia corren peligro en Colombia por su colaboración con la justicia de ese país.
Así mismo, el abogado dijo que los hechos por los que juzgaron al exfiscal son diferentes a los procesos que se adelantan en Colombia.



















