Con tranquilidad transcurrió ayer en Valledupar el primer Día sin Moto, tras la puesta en marcha del Decreto que expidió la Alcaldía como parte de un paquete de medida para contrarrestar los índices de accidentalidad y la delincuencia en esta capital.
Las calles y avenidas estuvieron despejadas, al aplicarse la restricción de motocicletas en la ciudad desde las 8:00 de la mañana hasta las 6:00 de la tarde. No obstante, para muchos se trata de una estrategia que los afecta, debido a que según indican no existe un óptimo servicio de transporte colectivo urbano, mientras que otros denunciaron especulaciones por parte de algunos taxistas.
Los comerciantes igualmente señalaron que las ventas bajaron durante esta jornada, al no haber el mismo flujo de personas que normalmente transitan por la zona céntrica. Sin embargo, así como cuestionaron las afectaciones en movilidad y comercio, destacaron la calma que caracterizó la jornada.
Margareth Martínez, quien ayer realizaba diligencias personales en el centro de Valledupar, dijo que tuvo que desplazarse a pie desde su casa por no encontrar un servicio de transporte público eficiente. “Como ciudadana pienso que por un lado la medida está bien porque existe más tranquilidad, hay sensación de seguridad y menos atracos; pero por otro nos perjudica porque los buses no llegan a todos los barrios, entonces hace falta la motocicleta para transportarse, y eso creo que el Alcalde lo debe entender”.
Para el comerciante estacionario, Luis Alberto Maestre, la restricción a las motocicletas afectó las ventas. No obstante, reconoció que hubo menos desorden en las vías sin las motos. “Yo estoy de acuerdo con la medida porque la verdad es que hay muchos atracos, este es un día que el señor Alcalde debe comparar en cifras con otros días si bajaron los homicidios y los robos”.
