Mateo Andrés Brieva Arellano, un niño de 11 años residente del barrio Olaya Herrera, en Cartagena, falleció el pasado 4 de octubre en el Hospital Infantil Napoleón Franco Pareja (Casa del Niño), tras permanecer en coma casi dos meses.
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El menor había sido sometido a una resonancia bajo sedación en el Centro Médico Buenos Aires, procedimiento durante el cual sufrió un paro respiratorio del que nunca se recuperó.
El Departamento Administrativo Distrital de Salud (Dadis) confirmó que adelanta una investigación para establecer las circunstancias del caso, mientras la madre del niño, Katrina Arellano, pide que se esclarezca lo ocurrido: “Yo solo quiero que me aclaren qué le hicieron a mi hijo. Él caminaba, jugaba fútbol, era un niño sano. Fuimos a hacerle un examen, no a buscar su muerte”, expresó.
Todo comenzó a inicios de junio, cuando Mateo pisó una botella de vidrio mientras jugaba en su barrio. El corte en el pie le fue tratado en el CAP de Olaya, donde le suturaron la herida. Sin embargo, días después, su madre notó que caminaba con dificultad.
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Al llevarlo nuevamente a control, los médicos descubrieron, mediante una ecografía, que tenía un fragmento de vidrio en la planta del pie.
El 7 de junio fue operado en la Casa del Niño para extraer el cuerpo extraño, y el 10 del mismo mes fue dado de alta con seguimiento en ortopedia y pediatría.
Posteriormente, el 13 de julio, la ortopeda ordenó una resonancia magnética para descartar residuos en el pie, examen que debía practicarse bajo sedación en el Centro Médico Buenos Aires.
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El procedimiento se realizó el 6 de agosto, día en que el niño no volvió a despertar. Según el testimonio de su madre, el personal médico le informó que la sedación duraría diez minutos, pero el menor sufrió un paro respiratorio y fue reanimado después de 15 minutos. Desde entonces permaneció intubado y en coma.
Investigación de las autoridades de salud
El Dadis confirmó que inició un proceso de verificación y acompañamiento desde el primer momento. En un comunicado, la entidad explicó que su equipo realizó visitas de inspección al Centro Médico Buenos Aires, con la participación del Centro de Regulación de Urgencias y Desastres (CRUED), el área de Prestación de Servicios y el equipo de Vigilancia y Control.
Durante la inspección, se detectaron hallazgos que llevaron al cierre temporal de los servicios del centro médico, mientras avanza el proceso sancionatorio en la Oficina Jurídica del Dadis.
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La entidad aseguró que brindó acompañamiento psicológico a los familiares.
Pronunciamiento del Centro Médico Buenos Aires
A través de un comunicado, el Centro Médico Buenos Aires lamentó profundamente el fallecimiento de Mateo Andrés y expresó sus condolencias a la familia.
“El Centro Médico Buenos Aires lamenta profundamente el fallecimiento del menor Mateo Andrés Brieva Arellano y expresa sus más sinceras condolencias a sus padres, familiares y allegados”, indicó la institución.
También aseguró haber entregado “toda la información disponible y pertinente a las autoridades competentes” y pidió permitir que el proceso investigativo avance sin la difusión de información no verificada.
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El centro médico reiteró su “compromiso con la transparencia, la ética y la calidad en la atención”, y manifestó su disposición a colaborar plenamente con las autoridades.
La familia de Mateo Andrés ha emprendido acciones ante la Personería Distrital, la Fiscalía y diversas veedurías ciudadanas para exigir claridad sobre lo ocurrido.
“Yo sé que nada me va a devolver a mi hijo, pero no quiero que otra madre viva este dolor”, expresó Katrina Arellano, quien insiste en que su hijo no tenía antecedentes médicos ni alergias que explicaran una reacción adversa a la sedación.