El Heraldo
Mery Granados.
Barranquilla

¿Por qué se inundaron más de 100 casas en el barrio Rebolo?

Autoridades lo atribuyen a una falla hidráulica por un taponamiento en la entrega del Arroyo Hospital en el Caño de la Auyama. Damnificados piden solución permanente.

En los 40 años que lleva Aura Arrieta viviendo en el barrio Rebolo “nunca” había padecido una tragedia como la que se presentó este martes, cuando a causa del desbordamiento del Arroyo Hospital su casa se inundó.

Los 80 mililitros (ml) de agua que cayeron en la ciudad, una cifra atípica según el gerente de la Agencia Distrital de Infraestructura (ADI), Alberto Salah, hizo que colapsara el canal construido hace más de un año y, por lo tanto, que el agua se metiera en más de 100 viviendas del sector, causándoles pérdidas de electrodomésticos, muebles y colchones, entre otros enseres.

Arrieta contó a EL HERALDO que durante el tiempo que lleva habitando en la vivienda ubicada en la carrera 35 con calle 11, no había tenido algún tipo de inconveniente por el arroyo que por ahí pasa. La mujer mayor de edad relató que vivió momentos de angustia y temor porque el agua le llegó de sorpresa y no esperaba una situación como esa.

“A pesar de que el arroyo venía por abajo no se inundaban las casas. Fueron momentos de angustia, todo el mundo gritaba y lloraba, fue terrible ver las casas llenas de agua y los muebles, el closet, ropa y colchones flotando”.

La mujer relató que fue necesaria la ayuda entre todos los vecinos para poder mover hacia la calle todos los artículos del hogar y así sacar con baldes el agua estancada dentro de los hogares. En ese proceso duraron alrededor de tres horas, según comentó la mujer. Curiosamente los vecinos dijeron que antes de la canalización no sufrían por inundaciones.

“Estábamos felices; esto no es vivir digno, vivir digno era que nos alzaran las casas y no ha sucedido”, comentó Leonardo Torres, habitante del barrio Rebolo, según dijo, desde hace 40 años.

Por su parte, Alberto Salah, gerente de la ADI, explicó que lo sucedido en Rebolo se produjo por una falla hidráulica, efecto de un taponamiento en la entrega del Arroyo Hospital en el Caño de la Auyama.

Dicho taponamiento lo que hizo fue que las aguas se represaran y buscaran una salida, que en este caso fueron las rejillas de la canalización de la carrera 35.

“Fue un evento atípico, cayó mucha agua y esta empezó a buscar los puntos más bajos y obviamente esos puntos son las casas, incluso hay muchas casas que están bajo el nivel del Arroyo”, dijo Salah.

 De igual forma resaltó que la canalización funciona de manera correcta y que el canal tiene la capacidad suficiente, pero que debido a la cantidad de agua represada que tenía el caño se presentó la emergencia en las viviendas. Frente a la situación, Salah dijo que se debe buscar una alternativa para la evacuación final de las aguas que recoge el canal cada vez que llueve. La alternativa que se escoja debe ir orientada a cambiar el mecanismo de ingreso del agua al canal, de tal manera que la corriente llegue a través de una curvatura y no de manera directa.

“La idea es que el arroyo no entre de manera directa porque en un caso como el de ayer (martes) que el caño estaba en su capacidad máxima hidráulica puede producir un choque y que vuelva a suceder”, explicó.

El gerente de la ADI hizo presencia ayer en toda la zona afectada para determinar qué había ocurrido y atender las quejas y necesidades los habitantes de Rebolo. En su visita también entregó colchonetas y mercados a los damnificados por el desbordamiento, para mitigar el impacto ocasionado.

Acción de tutela

Cabe recordar que la comunidad de este sector presentó el año pasado una Acción de Tutela que resultó a favor, puesto que la Corte Constitucional dictaminó el 16 de mayo de 2019 que el Distrito de la ciudad debía realizar un censo, reubicar a las personas que estaban en vulnerabilidad y realizar el levantamiento de las casas que se encontraban bajo el nivel de la canalización.

En esta se solicitó el derecho a una vivienda digna, ya que según la comunidad la canalización desmejoró la calidad de vida, “esta obra no vino a mejorar la calidad de vida de Rebolo sino a perjudicarnos. Pedimos que se ejecute lo que dice la sentencia de la corte y que nos cumplan y estar tranquilos cuando llueva”, dijo Arles Arrieta, vocero del barrio.

¿Qué dice el Ideam?

El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), a través de Daniel Useche, jefe de la oficina de Meteorología, indicó que se espera que el evento que se presentó el martes en la ciudad se repita durante los próximos días.

La mayor cantidad de nubosidad de lluvia se trasladó hacia el archipiélago de San Andrés y Providencia, por lo que este jueves la posibilidad de lluvia es muy baja. Sin embargo, de acuerdo con los modelos analizados por el Ideam, el fin de semana podría haber un incremento de las lluvias.

“Ya podemos hablar que se inició la temporada lluviosa en el Caribe colombiano, para este fin de semana y la próxima semana aumentará la probabilidad de lluvia. Por eso desde ya el Ideam está advirtiendo sobre esa situación”, agregó Useche.

Limpieza de las rejillas

Debido a la gran cantidad de basura que se vio arrastrada por la corriente de los arroyos, evidenciada en el taponamiento de algunas alcantarillas y la suspensión del servicio de agua potable en algunos sectores de la ciudad, la empresa de acueducto, alcantarillado y aseo de Barranquilla (Triple A) explicó la razón por la que se presentaron dichos hechos.

Los residuos sólidos o basuras depositadas inadecuadamente en la época de verano en los arroyos genera en el tiempo una descomposición que al presentarse las primeras lluvias es arrastrada en este caso desde el arroyo Don Juan hacia el río Magdalena.

Debido a que el arroyo Don Juan está localizado justo aguas arriba de la dársena donde se capta el agua cruda, obliga a suspender el bombeo de agua para no permitir que ingresen todas esas basuras y aguas descompuestas hacia las plantas de la empresa.

“Para no permitir el ingreso de basuras y agua descompuesta a nuestras plantas, se afectó sólo el 40 % de los barrios en Barranquilla, el resto de la ciudad se mantuvo atendida por las estaciones de rebombeo Recreo, Delicias y Ciudadela”, dijo la empresa.

De igual forma, indicó que el bombeo no se reinicia de manera segura hasta que la calidad del agua del río no mejore sus condiciones y la encuentren apta para los procesos de potabilización. En materia de aseo la empresa Triple A, finalizado el aguacero, implementó la operación de las limpiezas de las rejillas ubicadas en el norte, centro y sur de la ciudad. Son más de 400 rejillas intervenidas que fueron limpiadas externamente por 150 operarios, arrojando un tonelaje de 25 toneladas de residuos entre los que se encontraron hojas de árboles, piedras, arena, icopor, plástico y material residual.

Triple A continua con la operación de limpieza de manera mecánica, utilizando cargador y minicargador, así como con operarios de barrido para retirar especialmente la arena que quedó ubicada en vías principales como la calle Murillo, Vía 40, calle 65, Siete Bocas, calle 54, Ciudadela 20 de Julio y Simón Bolívar.

Los daños

Las fuertes lluvias, vientos y descargas eléctricas registradas este martes en Barranquilla, Puerto Colombia y Soledad, ocasionaron daños en el sistema eléctrico en varios sectores por lo que fue necesario que la empresa de energía Electricaribe destinara un mayor número de técnicos para superar las averías.

Una vez las condiciones climáticas lo permitieron el equipo técnico inició las maniobras para restablecer los circuitos afectados, logrando normalizar la mayoría de estos, según el informe entregado. “Es importante señalar que los técnicos no pueden manipular, por razones de seguridad, la infraestructura eléctrica cuando llueve. Cuando las condiciones climáticas son favorables y seguras se reinician de inmediato las labores operativas”, dijo Ramiro Castilla Andrade, Gerente de Electricaribe en Atlántico Norte.

De igual forma aclaró que adicional a las lluvias, se presentó una falla ajena a la empresa, en la subestación Nueva Barranquilla de Transelca, que afectó la continuidad del servicio en los circuitos Miramar, Nogales, Cable Cero Nueva Barranquilla, Juan Mina, Nueva Barranquilla 1, 5, 7 y 8

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