El Sistema de Transporte Masivo en Barranquilla y su área metropolitana ha empezado una nueva era. A través de un ambicioso plan liderado por el alcalde Alejandro Char, Transmetro avanza en un proceso de renovación que busca impactar a la comunidad.
Al cumplir 14 años de funcionamiento se puso en marcha un ambicioso plan que contempla la renovación de sus estaciones, buses y el sistema de recaudo, así como se ha planteado la integración de la tecnología.
En el mes de marzo, el alcalde Alejandro Char anunció la primera fase de este plan de recuperación con la intervención de las estaciones Chiquinquirá, Arenosa, La Ocho, Joe Arroyo y el Portal de Soledad.
“Se contempla modernización y mejoramiento de instalaciones, reparación de estructuras metálicas, cubiertas, taquillas, cerramientos, luminarias y señalética; y también, da continuidad en la recuperación de la flota”, aseguró el mandatario distrital en ese momento.
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Y recalcó que “con Transmetro seguiremos trabajando sin descanso en garantizar un servicio seguro y de calidad para el usuario”.
Poco a poco, estas nuevas estaciones han sido puestas en funcionamiento. En la estación La Arenosa ya se habilitó el renovado módulo expreso, mientras que en la estación La 8 se abrió el módulo corriente para el ascenso y descenso de los servicios troncales. Por su parte, en la estación Chiquinquirá ya está habilitado el módulo corriente.
“Con estas obras se busca, además, trabajar en el fortalecimiento de la seguridad como líderes que somos en el engranaje de actores viales. El objetivo es prevenir y minimizar la ocurrencia de incidentes al interior de estaciones y en sus accesos”, dijo –en su momento– Carlos Andrés López, gerente de Transmetro.
¿Qué piden los usuarios?
EL HERALDO realizó un recorrido por varias estaciones de Transmetro para conocer la opinión de la ciudadanía con relación a este plan de mejoramiento y dieran a conocer cuáles son las accione s prioritarias para brindar un servicio de calidad.
El ciudadano Gabriela Daza aseguró que el servicio en general es bueno y que lo utiliza desde cuando el pasaje costaba 1.300 pesos: “Necesitamos que este sea excelente ya que hoy en día un pasaje vale $3.100. Me parece bien que se realicen mejoras y adecuaciones en la estación debido a que estaban muy olvidadas y feas, pero es más necesario que mejoren el estado de los buses”.
La mujer señaló que debido a que el sistema de alimentadores es prestado por empresas de transporte externas a Transmetro, se han presentado inconvenientes y ha decaído la calidad del servicio.
“Los alimentadores hacían el transbordo y ahora cada vez que uno se monta le toca pagar y es algo que desmejora todo y como usuario siempre vivimos peleando con el abuso de los conductores”, expuso.
También destacó la necesidad de que la ciudad adopte una mejor cultura ciudadana debido a que las sillas azules de los buses están destinadas a mujeres embarazadas, niños, adultos mayores y personas en condición de discapacidad y es poco común ver a alguien ceder el puesto.
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“Yo nunca me sentaba en las sillas azules porque sabía que si alguna persona llegaba me tocaba cederla y ahora que estoy embarazada siempre me toca ir de pie. Los aires de los buses no sirven nunca y es normal quedar varados a mitad de camino”, recalcó la usuaria.
Por su parte, el ciudadano Zahed Rico mencionó que utiliza Transmetro desde hace cuatro años y que aunque se ha beneficiado del sistema, este necesita mejorar con prontitud.
“Supongo que es un proceso lento, pero muy necesario. Todos los usuarios esperamos con ansias esas mejoras para sentir que pagamos por un buen servicio”, dijo.
Mayor cobertura
A su turno, el arquitecto Víctor Cantillo explicó la necesidad que existe en la ciudad de robustecer y mejorar la calidad del servicio del sistema de transporte público como uno de los pilares fundamentales para mejorar la movilidad.
“Transmetro, yo creo que es parte importante de la solución y no el problema, debe ser una absoluta prioridad por parte de nuestros planificadores, de la autoridad y también de la ciudadanía. El sistema ha tenido problemas financieros casi que desde sus inicios, hay problemas enormes con la flota, es decir, casi que tenemos solo la mitad de la flota operando, que tenía cuando inicio”, dijo Cantillo.
Señaló que la cobertura de Transmetro ha disminuido y las frecuencias son bajas. Por eso instó a renovar la flota y a buscar fuentes de recursos que permitan mantener la operación, “porque definitivamente la tarifa tiene que tener algún tipo de subsidio, o sea, no es posible a las tarifas sociales que hoy se tienen mantener la operación de un sistema de calidad”.
Algunos detalles del plan
Recientemente, el Sistema de Transporte Masivo indicó que en conjunto con los concesionarios Sistur y Metrocaribe se viene trabajando en la recuperación de 116 vehículos que se vincularán a la operación durante 2024, más la sostenibilidad de los 140 vehículos operativos.
El ente gestor ha asumido la operación del recaudo y para ello se adelantó actualización tecnológica que permitió implementar la plataforma del sistema Recaudo Centralizado y Control de Flota (RCC – Transmetro).
Dicho proceso se adelantó bajo los lineamientos y permisos que le fueron otorgados por parte del Área Metropolitana de Barranquilla (AMB) para “interoperar con la plataforma tecnológica Sibus”. Esto conllevó a la instalación e integración con el sistema de 270 equipos validadores en las estaciones y buses, así como 204 consolas en la flota.
Transmetro también suscribió un convenio con la empresa SuperGiros para que los usuarios puedan recargar sus tarjetas en más de 300 puntos y se espera que en el mediano plazo se pueda hacer en los 2.200 habilitados en la ciudad y su área metropolitana.
