El Heraldo
Manjol rebosado en la calle 47 con carrera 35.
Barranquilla

Alerta por rebosamiento de alcantarillas en Barranquilla

Triple A entrega cinco recomendaciones para evitar estos incidentes.

Durante la mañana del pasado miércoles, Isabel Peña, transeúnte del barrio El Lucero, reportó a Wasapea el desbordamiento de una alcantarilla ubicada en la calle 47 con carrera 35. De acuerdo con la ciudadana, el incidente produjo olores fétidos en la cuadra además de una “leve inundación” en las vías.

Tras la intervención de la Triple A para resolver la emergencia, la ciudadana concluyó que el sistema de alcantarillado de su barrio se vio obstruido por las basuras que ella y sus vecinos arrojaron a los desagües de sus viviendas. 

Como Isabel, algunos ciudadanos han manifestado interés frente al origen de estas emergencias. Mientras algunos aseguran que se presentan por “falta de mantenimiento” en el acueducto, otros sugieren que la causa de los rebosamientos se origina en las residencias.

Para responder a las inquietudes de la comunidad, Ramón Hemer, gerente de Operaciones de Triple A, explicó a EL HERALDO  las principales razones por las que ocurren los taponamientos de alcantarillas.

Teniendo en cuenta que el sistema de alcantarillado de Barranquilla es de tipo separado, es decir exclusivo para el tránsito de aguas residuales, Hemer señala que la conexión entre el desagüe de agua lluvia y la red de alcantarillado de las residencias hace que los desechos como alimentos orgánicos, servilletas, aceites y papeles ingresen a un drenaje que no cuenta con las capacidades para transportar estos residuos. Es por esta razón que la presión del agua y las basuras acumuladas hace que las tapas de los manjoles se desajusten y  emanen vertimientos sobre las calles.  

Hemer aseguró que otra causa es la práctica de levantar las tapas de los manjoles para desviar los arroyos. “Algunos usuarios utilizan el sistema para descargar los arroyos, pero estos cauces arrastran piedras, hojas, arenillas, palos y basuras que finalmente obstruyen las tuberías”, señaló. 

El funcionario indicó que si bien la Triple A cuenta con un equipo especializado en el mantenimiento y limpieza de las tuberías, los escenarios podrían evitarse desde los hogares al tener en cuenta estas cinco recomendaciones.

• Evite levantar las tapas de los manjoles para desviar los arroyos. Esto satura el sistema y  permite el ingreso de basuras que originan taponamientos. 

• No conecte el desagüe de agua lluvia a la red de alcantarillado.

• En lo posible, no deposite restos de comidas, servilletas, ni tampoco aceites, en el lavaplatos.

• Desechos como papel higiénico, toallas de papel, algodones, cabellos y objetos sólidos, debe arrojarse sólo a la caneca, nunca al sanitario. 

• Los restaurantes o estaciones de servicio deben construir trampas de grasa y sedimentadores de sólidos para evitar taponamientos. Las grasas que recorren las tuberías se solidifican y provocan obstrucciones.

Tanto el buen uso como la limpieza del alcantarillado liberan a las viviendas y vías de aguas dañinas para la salud. Si en su barrio se presenta el rebosamiento del sistema de tuberías, recuerde que puede informar sobre la situación a la línea de atención 116 de Triple A.

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