La fauna silvestre en la región Caribe sigue siendo cazada, sacrificada y comercializada de manera ilegal en tiempos de Cuaresma y Semana Santa. Un verdadero viacrucis tienen que pasar estas especies, muchas en vías de extinción, que son sacadas de sus hábitats para ser sometidas a un sinnúmero de prácticas violentas para llegar a las mesas de decenas de personas, ante la costumbre ancestral de evitar el consumo de carnes rojas durante esta temporada.
Las iguanas son abiertas cruelmente para extraerles sus huevos y en muchas ocasiones la misma carne; las hicoteas y tortugas son transportadas en sacos, algunas desmembradas, para luego ser cocinadas con agua hirviendo aun estando vivas; el chigüiro o ‘ponche’ es sacrificado y su carne comercializada en mercados u otros sitios en condiciones insalubres.
Pese a estar tipificado este tipo de conductas como delito ambiental, en el Artículo 328 del Código Penal, algunas personas siguen vendiendo estas especies y evadiendo de manera constante los controles y operativos de las autoridades ambientales y la Policía.
Uno de los puntos más álgidos de la ciudad en donde se comercializan es en el sector del Mercado de Granos, en el Centro de Barranquilla. Allí los huevos de iguana están siendo vendidos entre $15 mil y $17 mil la ‘vara’ de 50 unidades; la hicotea a $25 mil y $30 mil; mientras que la carne de ‘ponche’ ahumado se consigue a $10 mil la libra.
Los controles
De acuerdo con Sergio Ramírez Payares, director de Barranquilla Verde, se ha venido trabajando articuladamente con otros entes de control como la Policía Ambiental y la Fiscalía para determinar puntos clave en donde se comercializa fauna silvestre y algunos subproductos.
'Se han realizado algunos operativos de control en conjunto con la Policía Ambiental, donde se han decomisado 480 huevos de iguana y se han capturado a 6 infractores quienes comercializaban ilícitamente estos huevos. Durante Semana Santa se intensificaran las labores de inspección, los operativos de control y las investigaciones para tratar de mitigar esta problemática', sostuvo el funcionario.
Precisó que a la fecha se ha identificado el sector del Mercado de Granos, ubicado entre las carreras 40 y 41 con calle 8, Barranquillita y sectores aledaños, como puntos críticos de comercialización ilegal de fauna silvestre.
Igualmente se han adelantado controles en barrios de invasión –principalmente al sur de Barranquilla–, en el parque Simón Bolívar y en zonas periféricas de la ciudad como el corregimiento de Juan Mina y los barrios aledaños al puente de la Cordialidad con Circunvalar.
'Estos barrios desafortunadamente presentan una limitante con el desconocimiento acerca de la ilegalidad de esta práctica y de la normativa vigente, a pesar de la fuerte labor de educación ambiental que se ha realizado en estos sectores (…) por medio de programas de educación ambiental se llega directamente a la comunidad para que conozcan la ilegalidad de estas prácticas y se incentive a la población para que no fomente esta práctica, denuncie a los infractores y rompa la cadena de tráfico', explicó .
Indicó que cualquier persona involucrada en esta práctica ilícita será sancionada según lo indique la normativa colombiana con multas entre 50 a 500 salarios mínimos legales vigentes e incluso con cárcel, dependiendo la gravedad del caso.
'Las especies de fauna silvestre son pilares muy importantes que mantienen un equilibrio en los ecosistemas, por lo que alterar estas poblaciones tendrá un impacto negativo en los hábitats naturales y a futuro una afectación directa a los humanos', anotó.
Las autoridades han habilitado unas líneas de atención a denuncias ante estas prácticas ilegales. A través de los números 3014140685 (Policía Ambiental) y 3173682850 (Patrulla Ambiental de Barranquilla Verde) los ciudadanos podrán contactarse y exponer los casos de tráfico y comercialización ilegal.
Otros operativos
Unidades adscritas a la seccional de Carabineros con el Grupo de Protección Ambiental y Recursos Naturales de la Policía Nacional, en operativos recientes, lograron la incautación de especies silvestres y subproductos que pretendían ser comercializados en el Mercado de Granos, en el Centro de Barranquilla.
Durante los controles se confiscaron 40 huevos de iguana, 14 tortugas de río, 1 babilla, 3 boas y 26 especímenes de la fauna colombiana tales como canarios, mochuelos, rosita, azulejos, chulo y cotorras.
La Policía Metropolitana de Barranquilla sostuvo que continuará desarrollando planes de intervención y control en diferentes puntos de la ciudad con el fin de contrarrestar el tráfico de especies silvestres. De igual forma, invitó a la comunidad a denunciar cualquier situación a través de la línea de emergencia 123.
Por su parte, la Estación de Guardacostas realizó la incautación de 37 tortugas de la especie Trachemys callirostris, conocida como hicotea, dos kilos de huevos de iguana, 30 kilos de carne de babilla y 5 kilos de carne de pelicano durante controles en el río Magdalena.
Evitar la extinción
La Corporación Autónoma Regional del Atlántico (CRA) señaló que para esta época, las hicoteas y las iguanas resultan ser las especies mayormente afectadas por la comercialización ilegal de sus huevos y carne en la región Caribe y en especial en el departamento.
'Se ha constatado la falta de desove o postura de estas especies en su hábitat natural; debido entre otras causas a la caza indiscriminada para el consumo de su carne y huevos', expuso Joe García, biólogo de la CRA.
Por lo anterior, conforme a sus funciones de autoridad ambiental, la Corporación viene ejecutando acciones para preservar estas especies silvestres y haciendo un llamado a la comunidad para que ayuden a prevenir la captura, comercialización y consumo de estos ejemplares.
'Estas acciones evitarán su extinción en nuestro departamento, igualmente la entidad estará desarrollando acciones de control y vigilancia cuya finalidad es la disminuir el tráfico de especies de la fauna silvestre', anotó el experto.
La CRA, en operativos recientes, logró en conjunto con la Policía la incautación de cuatro hicoteas desmembradas, las cuales iban transportadas en un vehículo tipo bus a la altura del Peaje Baranoa. A través la línea habilitada (3492482) se podrá hacer las denuncias respectivas.
'Durante esta temporada de Cuaresma ejercemos mayor control y vigilancia del tráfico ilegal de esta y otras especies apetecibles en la Semana Santa. Recuerda que el consumo de estas especies está prohibido y las pone en riesgo de extinción', apuntó la entidad.
Contexto sociocultural
De acuerdo con Jorge Bolívar, sociólogo e investigador de la Universidad Simón Bolívar, el consumo de 'carne de monte' es un fenómeno universal y su comercialización se desprende —según dijo– de un hecho ancestral, sociocultural, económico y de subsistencia.
'La carne de monte es la única posibilidad que tienen muchas comunidades para sobrevivir. La religión traída de España, al prohibir el consumo de carnes rojas en Semana Santa, fortaleció la costumbre de alimentarse con carne de monte en esta época religiosa', dijo.
Señaló que pese a que la ley colombiana permite a estas comunidades la caza y consumo de carne de monte, prohíbe su comercialización: 'El Estado no tiene la capacidad para contener esta práctica'.
Explicó que en algunos textos bíblicos se interpreta la carne como la representación del cuerpo de Cristo en crucifixión y que por esta interpretación cultural, ancestral y religiosa, se considera una falta de respeto que se consuma carne roja los viernes de Cuaresma y en Semana Santa y hacerlo se convirtió en pecado.




















