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A principios de este mes, el Instituto colombiano de Crédito Educativo y Estudios Técnicos en el Exterior –más conocido por sus siglas Icetex– anunció que –ante la falta de respaldo financiero del Gobierno nacional– se procedía a la suspensión del subsidio a la tasa de interés.

La noticia cayó como un balde de agua fría para los usuarios de este sistema de financiación educativa, teniendo en cuenta que conlleva a un “profundo encarecimiento” de la cuota que mensualmente deben cancelar a la entidad.

En ese momento, el Icetex publicó un mensaje en el cual se argumentó que la decisión fue adoptada ante el “complejo” panorama fiscal que enfrenta el Ejecutivo.

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“Durante tu proceso formativo, has contado con apoyos otorgados por la Nación, entre ellos el subsidio a la tasa de interés, el cual ha contribuido a tu bienestar y al desarrollo de tu proyecto académico. Sin embargo, el país hoy vive una compleja situación fiscal que como nación estamos enfrentando. Por esto, debemos informarte que a partir del período académico del año (2025-2) tu crédito educativo no tendrá subsidio a la tasa de interés, a cargo del Gobierno nacional”, se lee en el mensaje que compartieron con los afectados.

De inmediato se dieron a conocer voces de rechazo por parte de diversos sectores, teniendo en cuenta que una de las promesas de campaña del actual Gobierno fue el fortalecimiento de la entidad para mejorar las condiciones de crédito.

Asimismo, se reiteró de la necesidad de avanzar en un proceso de reforma del Icetex, con el objetivo de hacerlo más inclusivo, equitativo y eficiente, eliminando barreras económicas y ampliando las oportunidades de acceso para los jóvenes del país.

Cabe anotar que, a corte de agosto de 202, el Icetex cuenta con 893.663 beneficiarios activos; es decir, que están estudiando, culminaron recientemente sus estudios, o están en etapa de amortización o condonación del servicio al que accedieron.

EL HERALDOMiles de estudiantes en el país utilizan esta entidad para tener acceso a la educación superior.

De ese total de usuarios, 181.934 están estudiando programas de pregrado, posgrado, o se están formando en educación para el trabajo o desarrollo humano.

Es de anotar que en 75 años de historia, la entidad ha beneficiado a 5.7 millones de colombianos con créditos, fondos condonables, becas y programas de movilidad internacional para la educación superior y formación para el trabajo.

Las voces de los afectados

Mariana Pérez se graduó recientemente como diseñadora de modas tras haber estudiado con un crédito del Icetex y es una de las afectadas por la determinación de eliminar el subsidio a la tasa de interés.

“En 2024 fui beneficiaria del subsidio a la tasa de interés, que quedó en 0,91 %. No obstante, para este año 2025 me notificaron que ese subsidio me lo retiraron, a pesar de ser estrato 2. Así, mi tasa de interés pasó a 1,22 %, lo que disparó mis cuotas”, dijo.

Agregó que “este año apliqué a la cuarta etapa del Plan de Oportunidades, pues me encuentro en época de amortización, estoy empleada y tengo buen comportamiento de pago. La respuesta del Icetex fue que el valor a condonar sería de $804.000, pero únicamente si realizaba el pago de $46 millones”.

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Frente a este panorama, la joven sostuvo que “pretender que una persona que gana menos de dos salarios mínimos, que debe cubrir alimentación, servicios y apoyar económicamente a su familia, pague de inmediato una cifra tan desbordante, es sencillamente imposible”.

Una situación similar vive Martha Sánchez, quien asistió recientemente a un debate desarrollado en la Cámara de Representante por la crisis del Icetex y dio a conocer la situación que viene viviendo como codeudora del Icetex.

“Mi nieta empezó a estudiar odontología con un crédito de Icetex, con una tasa de interés correspondiente al IPC, que en ese momento estaba en 5.2, más un punto; es decir, 5.3. El problema es que ahora me subieron la tasa al 17.75 %. Pasamos de pagar cuotas de aproximadamente 460.000 pesos a la última liquidación, que fue esta semana, de 2.900.000 pesos. No tenemos de dónde sacar ese dinero”, dijo la mujer de la tercera edad.

Puso de presente que ha conocido la historia de otras familias que viven momentos más dramáticos a causa de esta decisión: “Hay padres de familia que solo ganan un salario mínimo y tienen que pagar cuotas altísimas. No es posible que el Gobierno nos haga esto”.

Mientras que Juan Manuel Teneche, un joven de 19 años que actualmente se forma como abogado, se mostró muy preocupado por la situación actual, siendo enfático al decir que el Gobierno nacional le ha dado la espalda a la juventud después de haber recibido su respaldo en las urnas.

“Los jóvenes hoy en día queremos estudiar, queremos generar país, y eso no va a pasar si el Gobierno nacional sigue la persecución hacia el Icetex y sigue la persecución hacia las universidades privadas. Puede que muchas de las universidades privadas efectivamente tienen unos costos altos, pero conozco a muchas universidades privadas que dan becas, que funcionan con el Icetex y que defienden la educación colombiana”, dijo.

Lucha jurídica

Algunas de las reclamaciones más vehementes vinieron por parte de la representante a la Cámara del Partido Verde, por Bogotá, Catherine Juvinao, quien interpuso una demanda para tratar de revertir la situación.

“Vamos a obligar al Gobierno de Gustavo Petro a reactivar los subsidios a los créditos de los usuarios de estratos 1, 2 y 3 que fueron eliminados en 2025, generando una verdadera catástrofe educativa. El Tribunal Administrativo de Cundinamarca aceptó nuestra demanda que busca obligar a que los ministerios de Hacienda y de Educación y el mismo Icetex giren los recursos que contempla la ley 1911 de 2018 y que les obliga a subsidiar los créditos de los jóvenes más vulnerables de este país”, aseguró la congresista.

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En la misma línea, expuso que “no más deudas impagables y sobre todo no más violencia psicológica y económica del mismo Estado contra la juventud que solamente desea salir adelante. Presidente Petro, con la educación no se juega. Desde el Congreso haremos lo que haga falta para que usted y el Estado colombiano le cumplan la palabra a esos centenares de miles de jóvenes a los que les prometieron alivios y salvamentos y en cambio solo les dejaron más deudas. Qué vergüenza que al parecer el único interés era engañarlos e instrumentalizarlos para llegar a la Presidencia”.

Visión de un experto

Jorge Valencia Cobos, coordinador del Observatorio de Educación de la Universidad del Norte, dijo que lo que se está viviendo con el Icetex es un problema de fondo y no algo coyuntural.

“La situación actual del Icetex es el resultado de un proceso multifactorial que se ha ido configurando de manera progresiva a lo largo de las últimas décadas. Su origen está vinculado a una serie de decisiones en materia de política pública, a las restricciones fiscales persistentes y a la evolución del modelo de financiamiento de la educación superior en el país. En este contexto, el recorte presupuestal estimado en un 33 % para el año 2025, junto con la eliminación de los subsidios a las tasas de interés, ha tenido un impacto considerable en la capacidad del Instituto para cumplir con su objetivo misional de ampliar el acceso a la educación superior”, explicó.

El experto puso de presente que, actualmente, se opera con tasas de interés que oscilan entre el 12,2 % y el 17,2 % efectivo anual. Sin embargo, la eliminación del subsidio a estas tasas representa un “cambio sustancial” en las condiciones de acceso al crédito educativo.

“En términos prácticos, esta medida puede traducirse en incrementos del 30 % al 50 % en el valor de la cuota mensual, dependiendo del monto original del préstamo y de las condiciones particulares de cada beneficiario”, agregó.

Así las cosas, bajo el supuesto de una cuota de 500 mil pesos, un estudiante podría llegar a pagar hasta 750 mil pesos en su cuota mensual.

Un golpe concreto a la economía de cualquier persona y que preocupa en especial a aquellos que todavía no han empezado a pagar sus créditos, pues están en la parte final de sus estudios.

Soluciones propuestas

El profesor Valencia Cobos aseguró que hay algunas medidas para tratar de solventar el problema: “La situación exige una respuesta que trascienda los ajustes coyunturales y se oriente hacia una reforma estructural coherente con sus principios misionales. Una salida práctica y eficiente debería recuperar el espíritu original de la institución”.

En ese sentido es puntual y recalcar que se deben contemplar medidas como restablecer mecanismos de subsidio parcial a las tasas de interés que alivien la carga financiera sin comprometer la sostenibilidad del sistema, así como garantizar mayor transparencia en la información crediticia para que los usuarios tomen decisiones informadas.

“Se deben implementar esquemas de pago contingentes al ingreso, que ajusten las cuotas según la capacidad económica del graduado y también se debe aumentar el presupuesto asignado al Icetex, asegurando su viabilidad operativa y su alcance social”, dijo el experto.

En la misma línea, recomendó que se diseñen programas de condonación condicionada para quienes trabajen en áreas estratégicas o regiones vulnerables.

“Estas acciones no solo permitirían estabilizar la operación del Icetex, sino también reorientar su misión hacia la garantía efectiva del derecho a la educación superior, en un marco de justicia social y responsabilidad pública”, puntualizó.

¿Es más barato que la banca privada?

Expertos aseguraron a EL HERALDO que –desde una perspectiva estrictamente aritmética– la tasa de interés nominal del Icetex (entre 12,2% y 17,2% EA) se mantiene por debajo de la ofrecida por la banca comercial que puede llegar al 24% efectivo anual: “Sin embargo, los plazos de amortización del Icetex son más extensos, de hasta 15 o 20 años, lo que complica la conclusión sobre qué opción resulta realmente más barata”.