Este miércoles se vivió una jornada traumática en materia de movilidad y orden público en Soledad por cuenta de las protestas de un grupo de conductores de motocarros, que bloquearon varios puntos del municipio, en reclamo de nuevas medidas de seguridad ante las crecientes extorsiones y el asesinato de un integrante del gremio durante el fin de semana.
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La convocatoria se hizo el lunes por redes sociales. Sobre las 10:20 a. m., un nutrido grupo ya se encontraba apostado en la calle 30, a la altura del centro comercial Plaza del Sol, en un completo tiro y afloje con la administración municipal para que los autorizan a salir a marchar.
Argemiro Capdevila, uno de los conductores, expresó que “todos los compañeros motocarristas estamos unidos por una sola causa y vamos a marchar pacíficamente, a hacernos sentir ya que nos escuchen porque somos víctimas de este flagelo, somos víctimas de la delincuencia y necesitamos también el apoyo del municipio”.
De otro lado, Carlos Valencia, secretario de Gobierno, hizo todo lo posible para disuadir la marcha, ante el conocimiento de antemano del riesgo de bloqueos.
“Sabemos que las manifestaciones pacíficas, constitucionalmente, están autorizadas y están en todo su derecho, pero yo considero que no podemos seguir afectando al resto del municipio, se están afectando ellos mismos, para llevar el sustento de su familia”, les dijo, pero sin mayores resultados.
Tras la insistencia, se llegó a un acuerdo para llevar la marcha por la calle 30 hasta el sector de la Alcaldía, en una jornada de manifestación que sería acompañada por el Tránsito de Soledad, la Policía Metropolitana, Policía Militar y otras instituciones. Así mismo, más motocarros se dieron cita en la calle 30.
Marcha y bloqueos
La larga fila de motocarros pronto llenó todo el ancho del carril sentido norte – sur de la calle 30, adelantando a automóviles particulares, así como camiones de carga y buses de servicio público que luego quedarían atrapados.
El descontrol y el caos se tomó rápidamente la situación, pues la marcha detuvo su paso a la altura de la carrera 19, en la estatua de San Antonio de Padua, entrada tradicional al municipio, donde bloquearon por completo la calle 30, incluso bajando a usuarios de otros motocarros que no se habían unido a la jornada de protestas.
De ahí en adelante, por espacios de varias horas, pese a las palabras de acompañamiento del grupo de diálogo de la Policía, de la Personería y de la misma Alcaldía, los motocarros no se movieron ni un centímetro.
Ya para las 2:00 p. m., los conductores bloqueaban los sectores de El Hipódromo, El Platanal, Soledad 2000 y la Alcaldía.
Finalmente, levantaron el plantón sobre las 3:00 de la tarde tras aceptar ser recibidos por la alcaldesa Alcira Sandoval. Este medio pudo conocer que esta y su equipo de trabajo se los quedaron esperando, pues no llegaron a la mesa de trabajo.
Normalidad en Malambo
De otro lado, Malambo fue otro municipio donde se anunciaron posibles afectaciones a la movilidad; sin embargo, se entregó un parte de tranquilidad por parte de las autoridades.
El teniente coronel Rony Buitrago, comandante del Batallón Vergara y Velasco, reafirmó que se han desarrollado operativos conjuntos con el respaldo de entidades como el Tránsito Municipal, en diferentes sectores y horarios, para aumentar la percepción de seguridad.
“El terrorismo es muy fácil de generarse desde un computador, pero las instituciones están más unidas que nunca. Damos un parte de tranquilidad a la ciudadanía”, expresó el oficial.
Por su parte, el secretario de Gobierno, Augusto Rivero, aseguró que se mantiene el apoyo institucional al gremio de motocarristas, quienes poco a poco han ido retomando sus labores.
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“Estamos acompañando con operativos, incluso conversando directamente con los motocarristas. La confianza está regresando poco a poco y hasta ahora no hay verificación de la autenticidad del panfleto”, cerró.