Cuando un teléfono móvil entra en contacto con agua, cada segundo cuenta. Aunque muchos modelos actuales incluyen cierto nivel de resistencia al líquido, ninguna tecnología garantiza inmunidad total ante la humedad. Por eso, conocer qué hacer —y qué no— tras un accidente de este tipo puede marcar la diferencia entre conservar o perder por completo el equipo.
(Le puede interesar: Alertan que Google Chrome dejará de funcionar en estos iPhone y iPad tras la llegada de iOS 26)
Una de las reacciones más comunes ante este tipo de situaciones es introducir el celular en arroz. Sin embargo, esta práctica, ampliamente difundida en redes sociales y consejos populares, ha sido desaconsejada por empresas como Apple.
“No coloque su iPhone en una bolsa de arroz. Esto podría permitir la entrada de pequeñas partículas de arroz en el puerto de carga y causar daños”, advierte la compañía en su página oficial de soporte.
(Vea aquí: WhatsApp anuncia que incorpora anuncios en la aplicación y planea un modelo de suscripción)
El arroz no solo es poco efectivo para secar el interior del dispositivo, sino que puede empeorar el problema al dejar residuos de polvo o almidón que interfieren con los conectores eléctricos, elevando el riesgo de corrosión o fallos de funcionamiento. Pero entonces, ¿qué debe hacer en estos casos?
Pasos recomendados si su celular cae al agua
En caso de que su celular se moje, lo primero es actuar con rapidez y sin improvisaciones. Estas son las acciones sugeridas por fabricantes y técnicos especializados:
- Desconecte cualquier cable o accesorio de inmediato, sin intentar cargar el equipo.
- No lo encienda si se apagó o muestra fallas. Encender un dispositivo mojado puede generar cortocircuitos.
- Colóquelo en posición vertical, con el puerto de carga apuntando hacia abajo, y dé golpecitos suaves para ayudar a drenar el líquido.
- No utilice fuentes de calor como secadores, estufas o microondas. Tampoco introduzca objetos en los conectores para intentar secarlo.
- Deje el celular en un lugar seco y ventilado al menos durante 30 minutos. Si al cabo de ese tiempo aún hay indicios de humedad, extienda el proceso hasta por 24 horas antes de intentar cargarlo.
Algunos teléfonos, como los modelos recientes de iPhone, están equipados con sensores que detectan la presencia de humedad en los puertos. Esta función bloquea automáticamente la carga como medida de protección. En esos casos, el sistema notificará al usuario para que espere antes de conectar el cargador nuevamente.
El riesgo no termina con el secado
Aunque el celular recupere su funcionamiento tras secarse, es posible que la humedad haya afectado componentes internos de forma paulatina. Por eso, si el equipo presenta comportamientos inusuales después del incidente, se recomienda acudir a un servicio técnico autorizado para una revisión completa.
Evitar el uso de métodos caseros sin respaldo técnico, como el arroz o el alcohol, y seguir las instrucciones del fabricante puede aumentar significativamente las probabilidades de recuperar el dispositivo sin consecuencias permanentes. La prevención, en este caso, no solo consiste en evitar que se moje, sino en saber cómo responder cuando sucede.