La industria del cine está reactivada. Las salas de proyección han sido habilitadas en diferentes países luego de los picos de la pandemia para que las nuevas producciones cobraran vida. Como si fuese poco, este martes inició de forma presencial la edición 74 del Festival de Cine de Cannes, el evento más glamuroso del séptimo arte.
El certamen, que se extenderá hasta el próximo 17 de julio, abrió su telón con una escena poco habitual: personas haciendo filas en los accesos al Palacio de Festivales para presentar su certificado sanitario o la prueba negativa de covid-19.
Encender el celular para que el personal de seguridad escanee esos documentos se ha convertido en el gesto más repetitivo a las afueras del recinto donde ayer arribó una constelación cinematográfica.
La proyección de la película Annette, del director francés Léos Carax, y la entrega a la actriz y directora Jodie Foster de la Palma de Oro honorífica, por 'una trayectoria artística brillante y una personalidad única', protagonizaron la primera jornada de este festival que comienza a recuperar el ritmo.
Foster, ganadora de dos premios Óscar como mejor actriz por las cintas Acusados (1989) y El silencio de los inocentes (1992), recibió el reconocimiento de manos del director español Pedro Almodóvar, quien la describió como una 'artista excepcional' que comenzó como una pequeña encantadora y se convirtió en una mujer cineasta en una época que no era tan habitual.