El deporte también ha evolucionado en cuanto a las normas de género. Muestra de ello es el joven atleta francés Sasha Zhoya, quien hará una declaración de estilo en la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París. Zhoya, que competirá en los 100 metros con vallas, desfilará con una falda, uniéndose a “al menos tres” miembros de la delegación francesa que solicitaron trajes modificados para la ocasión.
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El deseo de Zhoya de usar una falda se hizo público a través de un documental transmitido esta semana, que sigue sus preparativos para los Juegos. En él, se le ve consultando con los diseñadores de la indumentaria de la selección francesa sobre la posibilidad de llevar una falda en lugar del tradicional pantalón.
“Si las mujeres pueden usar pantalones, los hombres también deberían tener la opción de usar faldas”, declaró el atleta de 22 años, enfatizando la necesidad de igualdad en la moda deportiva. “Estamos en 2024, podemos usar de todo. La moda ya no distingue entre hombre y mujer”.
La elección de Zhoya, respaldada por la firma de lujo Berluti del conglomerado LVMH, refleja un cambio cultural más amplio. Berluti, encargada de diseñar los uniformes para el equipo francés, había previsto originalmente chaquetas, faldas y pantalones sin mangas para las mujeres, y chaquetas y pantalones de manga larga para los hombres.
Sin embargo, la petición de Zhoya y sus compañeros demuestra una creciente flexibilidad y aceptación en la moda deportiva.
