Mirando siempre hacia el futuro, y cumpliendo en el paso del tiempo con su único propósito, informar con la mayor objetividad posible, EL HERALDO no solo celebra la virtud de haber cumplido 90 años de trayectoria, sino también el privilegio de consolidarse como el Líder en la Costa, título honorífico que el ejercicio de un periodismo a secas y confiable le ha concedido.
{"titulo":"Estamos listos para seguir contando la historia del Caribe","enlace":"https://www.elheraldo.co/barranquilla/90-anos-el-heraldo-estamos-listos-para-seguir-contando-la-historia-del-caribe-1044385"}
Aunque en sus inicios esta casa editorial, insignia de Barranquilla y del Caribe colombiano, no era el gigante de la información que es hoy, la historia narra que su visión y esquema de trabajo, proyectado por sus fundadores, el periodista Juan B. Fernández Ortega y los abogados Alberto Pumarejo Vengochea y Luis Eduardo Manotas, hicieron que se convirtiera en uno de los diarios de mayor circulación y credibilidad en el país.
Sin embargo, en el uso retrospectivo de la memoria, noventa años no es una fecha para pasar desapercibida. Y es que EL HERALDO, para los que son del Caribe o han tenido algún acercamiento con la región, representa mucho más que un diario matutino.
{"titulo":"Barranquilla, una capital de avanzada y pionera en obras de impacto económico","enlace":"https://www.elheraldo.co/barranquilla/aviacion-deporte-navegacion-y-turismo-hitos-que-aportaron-al-progreso-de-barranquilla"}
Pese a que su primera circulación se da el 28 de octubre de 1933 con la portada del entonces presidente de la República, Alfonso López Pumarejo, edición que ahora se conserva en el archivo privado del periódico, sus inicios se remontan a la necesidad de crear un medio que reflejara la realidad social y política del Caribe colombiano.
Llegada histórica
Si bien antes de su aparición ya existían diarios más antiguos circulando en la ciudad como El Comercio, El Comercial y El Progreso, EL HERALDO diario de la mañana, su nombre original, aparece en el momento justo para marcar la historia.
Factores determinantes como la composición y función comercial de la ciudad, que daban paso a su época dorada marcando la conectividad del transporte y consolidando a Barranquilla como epicentro de negocios, de descanso, pero sobre todo de reflexión y cultura, hicieron que esta casa editorial se convirtiera en un espacio para pensar y contar la región.
{"titulo":"Reducir brechas sociales, seguridad, transporte y servicios, retos pendientes","enlace":"https://www.elheraldo.co/barranquilla/estos-son-los-desafios-que-debe-superar-barranquilla-en-los-proximos-10-anos-segun"}
Sus valores de inicio fueron la objetividad y veracidad, los cuales conserva hasta el día de hoy y que le han valido para quedarse en el corazón de los barranquilleros y los costeños, que lo han apropiado y lo han convertido en su patrimonio.
Más allá de informar lo sucedido en el día a día, el Líder en la Costa nace con una visión orientada a defender los intereses de la ciudad. Los valores sobre los que se fundamentó encontraron en la opinión pública de la Costa Caribe y el país su principal respaldo. Esto ha permitido que se mantenga vigente casi un siglo después de comenzar su trabajo informativo.
{"titulo":"Autoridades emiten recomendaciones para celebración de Halloween","enlace":"https://www.elheraldo.co/barranquilla/en-barranquilla-las-autoridades-emiten-recomendaciones-para-celebracion-de-halloween"}
Un relato del periodista Juan Goenaga explica que la creación y consolidación de EL HERALDO se gestó durante reuniones realizadas en el Club Barranquilla, ubicado en el centro de la ciudad, en las que participaban personajes, empresarios y dirigentes como Julio Montes, alcalde de Barranquilla; Ramón Santo Domingo y Enrique A. De la Rosa.
Asimismo, Luis Eduardo Manotas, en representación de Alberto Pumarejo, quien se encontraba en Bogotá como ministro de Correos y Telégrafos en el gabinete del presidente Enrique Olaya Herrera; Carlos Manuel Pereira, en representación de Juan B. Fernández Ortega, quien había sido nombrado por el presidente Olaya Herrera miembro de la Legación Diplomática de Colombia en Panamá; y Antonio Luis Carbonell Baena, propietario del Diario El Comercio.
Su primera sede
A pesar de que según los recuerdos de la recién fallecida Carolina Manotas Baena, hija de Luis Eduardo Manotas, fundador del periódico, las primeras ediciones de EL HERALDO se imprimieron en su casa en Barranquilla, la necesidad de llegar a más personas los obligó a buscar lo que sería su primera sede.
Como era de esperarse esta funcionó en una edificación ubicada en la llamada Calle Ancha, actual Paseo Bolívar, en el centro de Barranquilla, donde fue instalada la rotativa que los fundadores del periódico le compraron al Diario El Comercio.
{"titulo":"Antonio Barrios, el guardián de la primera edición de EL HERALDO","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/antonio-barrios-el-guardian-de-la-primera-edicion-de-el-heraldo-1044331"}
Además, el nombre EL HERALDO fue escogido luego de realizar un concurso popular que ganó la joven barranquillera Alicia Pacheco Hoyos.
'Ya el diario liberal EL HERALDO estaba circulando, apoyado por un grupo de amigos llenos de entusiasmo, cuando se vio que no estaban sólidas las bases financieras de sustentación, fue entonces cuando Enrique A. de la Rosa y todos los compañeros que junto a él estaban resolvieron entregarlo a otros amigos de las mismas tendencias liberales. Los doctores Pumarejo y Manotas resolvieron formar la sociedad comercial que debería financiar la empresa periodística y me invitaron a mí a que me pusiera al frente de ella. Así se hizo y llevamos aportes iguales a la nueva empresa', aseguró Juan B. Fernández Ortega, según lo indican documentos que resumen la historia de EL HERALDO.
Una nueva historia
Así comenzó a escribirse día a día una historia que hoy cumple 90 años. Aquella modesta empresa se ha convertido en el principal referente informativo de la ciudad y la región, con los postulados similares a los de aquel entonces, poniendo de antemano los intereses superiores de la comunidad.
De la casona inicial, el periódico pasó por otra sede en el centro de la ciudad (Calle Real), hasta llegar a la actual edificación ubicada en calle 53B con carrera 46, en la que confluyen las diferentes áreas del periódico.
{"titulo":"De la agricultura y la ganadería a la industria y los puertos","enlace":"https://www.elheraldo.co/economia/asi-ha-avanzado-la-economia-del-atlantico-durante-estos-90-anos-1044363"}
En el contexto más reciente, y desde su nueva sede, EL HERALDO continúo marcando hitos para el Caribe y Colombia, la mayoría de ellos basados en la confiabilidad ganada entre los barrranquilleros. El medio logró comenzar a llevar las noticias de la región a cada uno de los departamentos que la conformaban.
Además, siempre ha procurado espacios académicos y de reflexión como las célebres tertulias que lideró por muchos años Juan B. Fernández Renowitzky, su director por más de 45 años, y la Escuela Olguita Emiliani, una iniciativa de Ernesto McCausland cuando fue editor general, dirigida a la formación de habilidades para redacción.
Por su redacción también pasaron personajes de la talla del nobel Gabriel García Márquez, Juan Gossaín, Roberto Pombo, Olguita Emiliani, Gustavo Bell Lemus y Heriberto Fiorillo.
La segunda generación que sostuvo el legado
Pasado el tiempo, los primeros fundadores de EL HERALDO, Juan B. Fernández Ortega, Luis Eduardo Manotas y Alberto Pumarejo Vengochea fueron cediendo funciones a sus hijos, quienes respectivamente se convertirían en los abanderados de la continuidad del legado de sus padres para la región Caribe y el país. Juan B. Fernández Ortega se casó con la dama barranquillera María Renowitzky. Tuvieron dos hijos, Juan B. y Arturo Fernández Renowitzky.
Alberto Pumarejo Vengoechea se casó con la dama barranquillera Eva Certain. Tuvieron tres hijos: Alberto Mario —quien más tarde sería por muchos años gerente de EL HERALDO—, Beatriz Helena y Jaime Pumarejo Certain, quien sería, en 1988, el primer alcalde de Barranquilla por elección popular. Durante varios años fue también presidente de la junta directiva de EL HERALDO.
{"titulo":"Del jazz a la gastronomía, todos los grandes eventos de Curramba","enlace":"https://www.elheraldo.co/sociedad/los-grandes-eventos-que-han-llenado-de-cultura-barranquilla-1044319"}
Luis Eduardo Manotas Llinás se casó con doña Emilia Baena. Tuvieron dos hijas: Carolina y Margarita Manotas Baena. La primera de ellas contrajo matrimonio con el administrador de empresas barranquillero, egresado de la Facultad de Estudios Económicos y Financieros de Babson, Boston, Manuel De la Rosa Vives, quien se desempeñó por muchos años como gerente de EL HERALDO.
Margarita se casó con Alberto Gieseken Roncallo, quien ejerció, hasta su fallecimiento el 16 de septiembre de 1990, el cargo de superintendente de EL HERALDO.





















