Ante el radiante sol que se posó sobre el cielo en la mañana de ayer en Barranquilla, admiradores de Rafael Orozco se dieron cita desde muy temprano en el cementerio Jardines del Recuerdo, para conmemorar los 30 años de la muerte del ídolo vallenato.
Mientras el tiempo transcurría, el ambiente se fue amenizando al son de las canciones del Binomio de Oro que eran coreadas por las decenas de personas que llegaban al lugar.
La cerveza estuvo presente durante toda la ceremonia, y esta sirvió para que los asistentes refrescaran sus gargantas mientras cantaban a grito herido los éxitos más recordados de Rafael.
En el homenaje estuvieron presentes Wendy y Loraine Orozco, hijas del artista.
Además, Fabio Poveda, hijo de Fabio Poveda Márquez, amigo cercano de Rafael Orozco.
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Sus hijas
Loraine Orozco, en conversación con EL HERALDO, comentó: 'Me siento orgullosa de que recuerden a mi papá siempre. Esto nos llena de felicidad, siempre muy agradecida y los abrazamos con mucho amor. Muy felices de estar acá'.
Por su parte, Wendy agregó que 'indudablemente es algo que genera alegría, nostalgia y sentimiento al ver que después de tantos años muchas personas recuerden a mi papá. Es algo muy satisfactorio'.
Fabio Poveda recordó a Rafael Orozco como una persona que nunca estaba de mal humor, además de esos momentos que compartían jugando futbol.
'Recuerdo muchas cosas, pero más que todo el ser humano excepcional, cuando jugábamos futbol, mi papá lo comparaba con aquel goleador argentino en el mundial del 78, Leopoldo Jacinto Luque, porque a la hora de celebrar los goles levantaba los brazos', dijo Poveda.
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De romería por Rafael Orozco
Fanáticos de diferentes partes del país llegaron a la ciudad de Barranquilla para seguir homenajeando a su ídolo.
Óscar Meléndez fue uno de los que llegó desde el municipio de Garzón, Huila, y que tras una larga travesía llegaron a alrededor de las 3 de la mañana a la ciudad. 'De Garzón nos fuimos a Neiva, de ahí a Bogotá y de la capital viajamos hasta acá. Estamos viajando desde ayer', comentó el hombre.
Meléndez es seguidor de Rafael Orozco desde hace más de 40 años y dice que conquistó a su esposa gracias a su música. 'Ya llevo 34 años casado con mi esposa, incluso nuestra primera hija se llama Kelly Johana', agregó el fanático.
Jimena Santamaría llegó desde Medellín el miércoles y se instaló para esperar esta fecha que para ella es 'muy anhelada' porque es muy fanática de Rafael Orozco. 'Muy feliz de estar acá y vengo desde hace 10 años'.
Santamaría recuerda la primera vez que estuvo en el homenaje, quedó 'fascinada' y por eso no ha dejado de venir. 'Me motiva más que haya gente de diferentes ciudades y no dejar acabar el legado de Rafa'.
Ismael Meza trabaja hace 38 años en el cementerio donde yacen los restos del artista y desde hace 2 años es el encargado de arreglar la tumba de Orozco.
'Yo me demoro unas 2 o 3 horas haciendo los arreglos florales. Rafael Orozco se lo merece porque fue un ídolo que marcó la historia, vistió de frac el vallenato', apuntó Meza.
El hombre también recordó que a pesar de que ya no se acerca la misma cantidad de personas que años atrás, 'aún está ese sentir del ídolo. Pero antes venían personas de otros países, de las Islas del Caribe', concluyó.
Henry Vergel, de 57 años, llegó desde el municipio de Abrego en Norte de Santander para este homenaje. 'Sigo a Rafael Orozco desde hace 42 años, desde los 16 años lo sigo, me emociona hasta las lágrimas ver todo esto'.
El hombre lleva 14 años viniendo a la ciudad y declaró: 'He soñado varias veces con Rafa y me dice que lo vaya a ver cantar'.
