En la localidad Escrennes, sur de París (Francia), un niño de nueve años murió tras ser atacado por un perro de raza rottweiler dentro de su casa.

De acuerdo con el reporte entregado por el fiscal adjunto de Orléans, Emmanuel Delorme, el menor de edad se encontraba solo con el canino en el interior de la vivienda al momento del ataque.
El padre y el hermano mayor de la víctima habían salido del inmueble a hacer compras, por lo que nadie pudo auxiliar al niño cuando el perro lo atacó el pasado sábado 2 de agosto.
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Un vecino fue quien se dio cuenta de que algo ocurría en la vivienda de la víctima, pues escuchó sus gritos desesperados en medio de la agresión del rottweiler, que pesaba sesenta kilos.
Hizo una llamada telefónica al padre del niño y le avisó sobre los gritos que había escuchado. El hombre se apresuró en llegar a su casa y al llegar encontró a su hijo gravemente herido y en posición boca abajo.

El perro había mordido al menor de nueve años en la cabeza y cuello, causándole graves lesiones que comprometían su vida. El comportamiento del canino no cambió con la llegada del padre del niño, siguió mostrándose agresivo, por lo que el hombre lo apuñaló dos veces para que no continuara el ataque contra su hijo.
El pequeño aún estaba con vida cuando llegó su padre a la vivienda, pero las graves heridas causaron su muerte a los pocos minutos en el lugar, sin dar oportunidad a que fuese trasladado a un centro asistencial.
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Tras conocer el lamentable caso, la Fiscalía de Francia inició una investigación por presunto homicidio involuntario. Busca determinar si el padre contaba con el permiso legal requerido para tener un perro de esta raza como mascota.
Por su parte, el canino fue sacrificado y será sometido a exámenes para descartar enfermedades como la rabia.