Inflación de septiembre llegó a 11,44 %, la más alta en 23 años
El Dane informó que nuevamente los alimentos jalonaron el alza del IPC, en especial el arroz, huevos y frutas frescas. Gasolina será un elemento alcista, dicen expertos.
Jalonada nuevamente por las alzas en los precios de los alimentos la inflación anual de Colombia a septiembre de 2022 fue de 11,44 %.
Así lo informó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), con los resultados del Índice de Precios al Consumidor (IPC) para el mes de septiembre.
La entidad reveló que la variación del (IPC) en el mes de septiembre fue de 0,93 %.
El aumento en los precios de los alimentos llevó la inflación anual de este grupo a un 26,62 %, seguido de los precios de restaurantes y hoteles con 16,27 % y bienes y servicios para el hogar con 16,20 %, siendo estos los que superaron el indicador nacional.
Cabe destacar que el registro anual de septiembre es el más alto desde enero de 1999.
Por ciudades, Cúcuta (1,20 %); Armenia (1,18 %); Ibagué (1,15 %) y Popayán (1,14 %), fueron las zonas que mayor variación tuvieron durante el mes de septiembre en el costo de vida.
En la inflación anualizada por ciudades, se destacan cinco capitales costeñas dentro de las seis con el mayor costo de vida, en el que Cúcuta lidera la tabla con 14,73 %; le sigue Santa Marta (14,41 %); Valledupar (14,31 %); Riohacha (14,34 %); Montería (13,23 %) y Barranquilla (13,16 %).
La directora del Dane, Piedad Urdinola, indicó que en materia de alimentos se evidenciaron incrementos de precio en las frutas frescas, arroz y huevos.
“La transmisión de la subida de precios para la cadena de producción cuando vamos a restaurantes no es inmediata, entonces vamos a ver un rezago en esos efectos de transmisión del alza de precios de alimentos”, puntualizó Urdinola.
La capital del Atlántico presentó una variación anualizada de 13,16 %, es decir, 1,7 puntos porcentuales por encima de la nacional, e incrementando más del doble frente a 2021 cuando cerró en 5,8 %.
De acuerdo con Juan Manuel Alvarado, gerente de Ciudad, el incremento en las tarifas de energía y los alimentos siguen impactando a Barranquilla.
Jackeline Piraján, economista de Scotiabank Colpatria, indicó que nuevamente se ven presiones en términos de la carne de cerdo y de res, incluso el pescado.
“A esto también se está sumando el hecho de que varios elementos procesados nuevamente están exhibiendo nuevas presiones al alza, ese es el caso por ejemplo del pan”, recalcó Piraján.
Agregó que esas presiones al concentrarse en alimentos y también en alojamiento están impactando sobre todo más a las personas de bajos ingresos y de ingresos vulnerables.
“Lo que podemos destacar es que si bien en el promedio nacional la inflación está sobre el 11.44 %, para las personas más vulnerables esa inflación supera el 13 %”, insistió la economista.
Por otra parte, Sarah Garcés, analista de Acciones y Valores, resaltó que la vivienda en el país se ha vuelto más costosa, dado el incremento en los precios de la energía.
“Esto podría intensificarse tras la decisión del recorte de la producción de la OPEP”, detalló Garcés.
Añadió que ese rubro podría tener un mayor aumento en las personas más vulnerables.
Con estos indicadores se entra en la recta final del año, y la economista Jackeline Piraján espera que la inflación se mantenga cerca del 11,5 % o 12 %, con el fin de que se genere un piso para las negociaciones del salario mínimo.
“De cara a 2023 estamos esperando que las presiones inflacionarias se mantengan altas en la primera parte del año y que posteriormente en el segundo semestre empecemos a ver algo de moderaciones en estas tasas de inflación”, sostuvo Piraján.
Agregó que por el momento este resultado implica que el Banco de la República debe seguir subiendo sus tasas de interés.
“Probablemente vamos a volver a ver algún movimiento en la reunión de octubre y esto se transmitiría hacia futuro a mayores costos en el endeudamiento de los hogares, pero tal vez, eventualmente también a mayores remuneraciones de los depósitos de ahorro de los usuarios del sistema financiero”, manifestó la economista.
A su vez, Juan David Ballén, director de Análisis y Estrategia de Casa de Bolsa SCB, recalcó que existe una expectativa de que la economía global entre en recesión en 2023, y dependiendo de que tan profunda sea contribuiría a disminuir las expectativas de inflación al enfriar la demanda, el consumo y la creación de empleo.
”Existe el riesgo de que el IPC se mantenga elevado en el primer semestre de 2023 debido a que la indexación a la inflación y aumento del salario mínimo podrían llegar a ser a doble dígito”, dijo el experto a EL HERALDO.
Por su parte, la Dirección de Investigaciones Económicas, Sectoriales y de Mercado de Bancolombia resaltó que este resultado confirma que “Colombia está viviendo el choque inflacionario más pronunciado en lo que va de este siglo, y llevará a que al cierre de este año la variación anual de los precios esté en el rango superior de nuestros escenarios”.
“Los ajustes en el precio de la gasolina corriente serán otro elemento alcista con efectos directos en el rubro de regulados e indirectos en otros componentes del IPC”, manifestó el análisis.