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El exfutbolista y hoy entrenador de fútbol, el samario Víctor González Scott, ‘El Chino’, recuerda que el último abrazo que le dio a su ahijado Radamel Falcao García fue hace un año en un juego amistoso que la selección tuvo en Colombia. Ese día hablaron como media hora y entre otros temas salieron a relucir algunas de las anécdotas que vivió con su compadre.

Ayer el abrazo fue más fuerte, cargado de un sentimiento especial y casi paterno, porque cuando el compadre fallece el padrino de su hijo asume un rol similar.

'Aquí estoy. No solamente soy el amigo y su padrino, sino el ser humano que lo va a apoyar y el que reemplazará al padre para darle en un momento dado un consejo que necesite'.

González Scott, asistente técnico de Fernando Santa en el Deportivo Pereira, en el torneo de la ‘B’, dijo además, que no le era fácil estar despidiendo a su entrañable amigo, porque no pensó que se fuera tan pronto.

Manifestó que gracias a la tecnología mantenían una constante comunicación y recuerda que 'el 28 de diciembre compartieron en la capital de Antioquia en una integración de los jugadores del Deportivo Independiente Medellín'.

'Fue un privilegio tenerlo como amigo y mucho más como compadre', anotó.

Víctor González Scott manifestó que al irse Radamel García King, se le fue a él un sempiterno consejero.

'Lo llevaré por siempre en mi corazón y siempre recordaré las cosas que me dijo', precisó el ex futbolista, quien recalcó que fue un privilegio el que entre tantos amigos del fútbol, lo haya escogido a él como padrino de su hijo.