Manuel Patrocinio, un legado poético de 104 años

Sus 104 años no han sido suficientes para expresar las sublimes emociones que guarda consigo en su memoria y corazón. La vida misma de Manuel Patrocinio Algarín Palma, oriundo de Baranoa, Atlántico, es una poesía que entre versos y prosa ha sabido escribir hasta el momento sin darle un punto final.

Encontrar lo sublime, cuestionarse lo común y generar catarsis en los lectores han sido sus mayores virtudes. A su casa, ubicada en el barrio Piñique, llegan propios y foráneos en busca de maravillarse con la elocuencia de Patrocinio, una institución viviente que guarda secretos de su tierra baranoera.

Muchos son los distintivos que anteceden la personalidad de ‘Don Patro’, como le dicen de cariño algunos coterráneos, sin embargo, el más significativo de los que se le aduce es el de ser: el poeta vivo más longevo del mundo.

El baranoero afirma que fue a la escuela por su madre, quien preocupada por su futuro, quiso brindarle la educación que había en el momento.

Cuando cursaba segundo de primaria, un profesor lo 'descubre' al verlo declamar un poema propio, desde entonces, se fue dando a conocer como un joven enamorado de la poesía.

'Soy de una escasa formación académica, escasísima, confieso que apenas logré hacer cuarto año de primaria, lo hice a los dieciocho años y aquí estoy'.

En su obra poética prima el estilo romántico y contrario al popular refrán, Patrocinio es profeta en su tierra. Le ha escrito a Baranoa, a los campesinos, al amor, al dolor y un sinfín de temas que ha querido abordar desde su prosa.

Cervantes, García Lorca, Quevedo y Rubén Darío han sido algunos de los escritores que influenciaron su obra. Sus poemas, acrósticos y versos llevan consigo un léxico clásico.

Su primer libro, titulado Hojas de otoño, logró publicarlo a los 77 años, con el respaldo de la Gobernación del Atlántico. Luego, de manera independiente, imprimió Luces de mi ocaso y Manantial de acrósticos.

El centenario escritor que ha hecho su vida en Baranoa, entre sus anécdotas más populares, destaca el primer viaje que hizo desde su terruño a Barranquilla en burro. Salió a las 11:30 de la noche y llegó al amanecer del siguiente día.

El poeta que este año cumplirá un siglo y un lustro, ha sido testigo de dos Guerras Mundiales, dos pandemias, la Masacre de las Bananeras, entre otros hechos históricos.

Como si fuese poco, este hombre de pelo canoso y voz pausada es el autor del himno de su municipio, cuya plaza principal lleva su nombre como una forma de homenaje en vida.

De las doce estrofas que hacen parte del himno, dos de ellas se las dedicó a Juan José Nieto Gil, el único presidente afro descendiente que ha tenido Colombia.

A su edad ‘Don Patro’ ha recibido un sinnúmero de reconocimientos, entre los cuales se destaca la condecoración de ‘Caballero de la República’ que le hizo el Senado al cumplir 100 años y también de un reconocimiento del Concejo de Barranquilla.

Kevin Polo Acosta, un joven baranoero, quien ha sido testigo de las recientes hazañas de este poeta, afirma que su vida y obra es motivo de orgullo para todo el municipio.

'Manuel Patrocinio es un legado vivo y un orgullo para nuestro municipio. Escuchar el himno compuesto por él es un viaje a la historia de aquella Baranoa pujante que amamos. Debería decirnos los secretos para alcanzar su edad', afirma.

Este año cumple 65 años de casado con su esposa Carmen Blanco, una pareja que a pesar de los momentos difíciles, han permanecido en armonía junto a sus cinco hijos.

Carmen tiene 96 años y ha sido la musa más importante que ha tenido el poeta para escribir sus versos.

La noche del beso robado es uno de los poemas más celebres que tiene Patrocinio dedicado e inspirado por su esposa.

'Mi esposa ha sido el todo en mi vida, por ella me orienté en esta vida porque en mi juventud me gustaba el juego y ella me encarriló, ha sido mi inspiración de tantos poemas', afirma Patrocinio.

Carmen Alicia, su segunda hija, indica que su padre ha sido un 'referente'.

'Para la familia, mi padre es un ser humano maravilloso, es amoroso, responsable, romántico, pero sobre todo humanista, está cargado de valores y principios. Para los baranoeros se ha constituido en un gran referente que ha ido trascendiendo generaciones, en la actualidad vienen niños y jóvenes a tomar notas de su biografía', expresa su hija.