La Fiscalía General de la Nación descartó por ahora de que exista un plan criminal para atentar contra el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, y del que se había referido el martes pasado.
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El burgomaestre había asegurado que conocía de las amenazas, sin embargo, de acuerdo a lo revelado por RCN, el ente acusador aclaró que las supuestas amenazas no eran más que una broma entre unos expendedores en Bucaramanga.
Eso fue lo que recolectaron las interceptaciones que adelantó la Fiscalía en el marco de las investigaciones por el atentado a bala en contra del senador Miguel Uribe el pasado 7 de junio.
Así las cosas, el ente investigador deja claro que lo dicho por los mencionados expendedores de droga no guarda ninguna relación con un posible atentado en contra de los mandatario de los bogotanos.
Sobre el supuesto plan criminal, Galán se refirió el pasado martes aseguran que “conocía esa información hace varias semanas. Me fue presentada por la Fiscalía y la Policía, porque son ellos los encargados de evaluarla y determinar el sustento que tiene esa información y las medidas que se requieran tomar a raíz de esa información”.
Y agregó: “Yo confío en las investigaciones y estoy trabajando en contacto permanente con Fiscalía y Policía”, se le escuchas decir al mandatario de la capital de la República”.
Lo que revelaron las interceptaciones
En la llamada, que fue interceptada en Bucaramanga, habla un hombre que las autoridades identifican con el alias de Mono, y otro interlocutor de quien aún no se tiene información.
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“Se me cayó el sicario de Bogotá, el que mande a matar al alcalde de Bogotá”, dice ‘Mono’ en la llamada que está en poder de la Fiscalía y la Policía, según recoge ‘Noticias RCN’.
Del sicario al que se refiere el ‘Mono’ es un adolescente de 13 años, lo que hace recordar el caso de Miguel Uribe Turbay, a quien le disparó con una Glock 9 milímetros un menor de 15 años de edad.
“Se me cayó en Bosa, tiene 13 años, entonces para que me ayude a sacarlo”, dice ‘Mono’.
Agrega: “El chino se cayó, hizo la vuelta del concejal, pero los escoltas lo cogieron”.
El otro hombre le pregunta: “¿Usted dónde está?“, y el ‘Mono’ responde: “Estoy en Bogotá, ya tengo los kamikaze en la entrada y todo está esperándolo”.
Durante la llamada también se refieren a una mujer, pero sin detalles: “¿Qué necesita? Dígale a la que está hablando allá atrás que no sea sapa", dice ‘Mono’.
“No, un vago que estoy entregando”, contesta el interlocutor desconocido. ‘Mono’ indica: “Dígale que sí, que llegue”.
