Ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) el Estado colombiano reconoció su responsabilidad internacional por el asesinato del reconocido periodista y humorista Jaime Hernando Garzón Forero a casi 26 años del crimen que acabó con su vida.
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El Estado, a través de la Agencia Nacional de Defensa Jurídica del Estado (Andje), admitió que vulneró los derechos a la vida, integridad personal y a la libertad de pensamiento y expresión del también mediador humanitario.
“El Estado lamenta profundamente los hechos que resultaron en el silenciamiento de uno de los más destacados líderes de opinión y periodismo crítico del país, lo que constituye una pérdida para la sociedad en su conjunto”, empezó diciendo la Andje en un comunicado.
Asimismo, señalaron que “a través de las observaciones, se señaló que el avance de las investigaciones ha permitido establecer que el plan criminal fue ejecutado con la aquiescencia de agentes del Estado”.
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Los funcionarios de la entidad llegaron a un acuerdo de solución amistosa con la familia del comunicador asesinado en 1999 para evitar al país una condena por parte del organismo internacional.
La Andje agregó que paralelo al reconocimiento de responsabilidad, también se adelantará un proceso de reparación a las víctimas, aunque aún no se conocen detalles de cómo se llevara a cabo este punto, el Gobierno aseguró que será “integral”.
“(Garzón) había estado obrando como mediador para la liberación de personas secuestradas por las guerrillas de las FARC y el ELN desde 1998, y que en virtud de tales gestiones había sido catalogado como colaborador o cómplice de la guerrilla por parte de altos estamentos militares y grupos paramilitares del país”, dice el trámite de la CIDH.
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El organismo detalla que estos calificativos llevaron a pensar a funcionarios de ese entonces que Garzón “se estaba lucrando con sus gestiones para el pago de los rescates por los familiares de las víctimas secuestradas, y que estaba facilitando la continuidad del negocio del secuestro en Colombia”.
Uno de esos funcionarios fue José Miguel Narváez, exsubdirector del extinto DAS, que aprovechando su cercanía con el paramilitar Carlos Castaño le sugirió asesinar al humorista. Narváez fue condenado por estos hechos a 26 años de prisión, decisión que fue confirmado en 2021 por la Corte Suprema de Justicia.
Jaime Hernando Garzón Forero fue finalmente baleado en el interior de su vehículo por miembros de la banda criminal La Terraza en asocio con las fuerzas de seguridad del Estado el 13 de agosto de 1999.
