Decenas de cristianos realizan un plantón religioso para protestar por la suspensión de las oraciones al inicio de las sesiones en el Concejo, ordenada por un juez.
La determinación legal de suspender esta práctica religiosa no sólo en el recinto de sesiones del Concejo, sino en instituciones privadas y públicas, provocó la reacción de los creyentes que llevan dos días de manifestaciones, con oraciones y congregaciones en parques, plazas y vecindarios.

Entre tanto, el juez décimo primero oral de Cartagena, Alejandro Bonilla, explicó que la suya es una medida cautelar, que no ha prohibido que los cartageneros oren de acuerdo a sus creencias religiosas, sino que ordenó la suspensión de la práctica de la oración en el Concejo y otras instituciones, como lo establece el Acuerdo 005 del 2007. Considera que esto va en contra principios constitucionales.