Compartir:

Muchos estragos de la huella antropogénica en la biodiversidad son silentes en la sociedad, porque aquellos que sufren las consecuencias no están en la capacidad de expresarlo. Pese a que el país avanza en legislaciones ecológicas, aún no se ha puesto –rigurosamente– la lupa sobre las carreteras, donde miles de animales silvestres son atropellados por conductores.

Es un grito silencioso que se vuelve una forma de protesta cuando sus restos quedan explícitamente sobre el áspero pavimento –un suelo ajeno al de su hogar–, evidenciando así la indecencia humana.

Le puede interesar: Obras de recuperación del parque Jorge Robledo Ortiz presentan un avance del 40%

Según las denuncias de la senadora ambientalista Andrea Padilla, una de las principales premisas de esta problemática es que hay información dispareja, escasa y alarmante. De acuerdo con el Invías, entre 2019 y 2024, 5.321 animales silvestres han muerto atropellados, y 1.590 de estos corresponden a los departamentos de Atlántico, Bolívar, Magdalena, Guajira, Cesar, Córdoba y Sucre.

Por otro lado, el Instituto Humboldt, entidad adscrita al Ministerio de Ambiente, reportó 300 mil siniestros de fauna silvestre en un solo año y en un solo departamento. Recosfa, una red académica, reportó 572.000 animales atropellados en tan solo 140 kilómetros de vía.

 “Es decir, podríamos estar superando el millón de animales atropellados en todo el país, según esta medición”, expresó la senadora.

A nivel regional, la Universidad del Atlántico midió dos segmentos de la Troncal Caribe y reportó 208 animales atropellados en solo cinco meses, entre 2016 y 2017. Otra medición, realizada por el Invías entre 2011 y 2012, arrojó 608 animales atropellados en tan solo las vías Sincelejo – San Onofre y Sincelejo – Ovejas en seis meses.

Además: Incertidumbre entre mandatarios por posible apagón en el Caribe

Nelson Rangel, científico e investigador de la Universidad del Atlántico, adelanta un estudio sobre esta situación crítica. En el departamento, el docente encontró que este fenómeno ocurre principalmente en los corredores viales que atraviesan o bordean ecosistemas sensibles, tales como los manglares de Luruaco y Usiacurí, así como las franjas costeras entre Puerto Colombia, Juan de Acosta y Tubará.

Asimismo, identificó que los animales mayormente atropellados son los reptiles (iguanas y serpientes), mamíferos pequeños (mapaches, zorros cangrejeros, murciélagos y osos hormigueros), aves (garzas, búhos, gavilanes y otras especies que anidan cerca de las vías), así como cangrejos.

EL HERALDOInformación del estudio que adelanta el experto Nelson Rangel.

“Lo que alcancé a analizar es que esta problemática se debe principalmente a la expansión vial sin pasos de fauna, la iluminación artificial nocturna –que puede desorientar a algunos animales– y la alta velocidad”, explicó el experto.

Debate en el Congreso

La senadora Padilla lideró un debate político sobre este fenómeno, en el cual se identificaron tres problemáticas principales: no se cuenta con un sistema informativo; no hay un protocolo unificado para la atención de animales atropellados; y tampoco existen mediciones sobre los resultados de las estrategias implementadas para evitar o reducir el atropellamiento de fauna silvestre.

“Todo es abrir nuevas vías, todo es meter cemento, pero esto implica fracturar ecosistemas. Es decir, no hay realmente, de fondo, un compromiso como país con la protección de la vida silvestre”, sentenció.

Lea también: Mediante el mecanismo de subasta, la Creg aseguró energía para el país entre 2025 y 2028

En relación con el primer desafío, la congresista explicó que, debido a las cifras dispersas, no existe una fuente única y confiable para identificar puntos críticos. Respecto a la falta de un procedimiento definido para atender a los animales atropellados, señaló que las personas no saben a qué entidad deben comunicarse cuando se topan con una especie en ese estado.

“Las entidades que han venido socorriendo animales atropellados son las corporaciones autónomas regionales, aunque en sus funciones no está establecido el socorro de animales silvestres accidentados”, dijo.

Y añadió que “sumado a eso, pues no es fácil. No todos los pocos centros de atención y valoración de fauna silvestre que hay en el país –valga la aclaración: el 50 % del país no cuenta con estos centros; incluso departamentos estratégicos como el Amazonas no tienen ninguno– disponen de sucursales”.

Finalmente se evidenció que no hay una medición de resultados sobre las estrategias implementadas: en el país se han instalado 2.185 pasos de fauna y 355 puntos de señalización, pero no existen datos que indiquen en qué medida se ha reducido la siniestralidad en esos puntos.

“Lo que observamos en el debate de control político es la falta de una política nacional que defina todo: responsables, estrategias, indicadores, sistemas de medición, sistema de información y una entidad coordinadora”, mencionó.

Tras culminar el encuentro, se acordó que cada tres meses, la mesa interministerial deberá enviar un reporte a la Comisión Quinta sobre cifras, estrategias y medidas para hacer seguimiento continuo a esta problemática.

Y la senadora Padilla invitó a tener empatía al volante: “La gente no ha entendido la importancia de frenar, de bajar la velocidad, de respetar la señalización y los reductores de velocidad. Falta mucha empatía, pero también falta mucha información”.

Más empatía y gestión

Sin duda, los primeros en el eslabón de esta situación son los seres humanos. Joe García, biólogo de la Corporación Autónoma Regional del Atlántico, destacó la importancia de conducir con precaución, tanto por seguridad de los conductores como por la presencia de animales en la vía.

Johnny OlivaresLos pasos de fauna son posibles soluciones para la siniestralidad.

“Al concesionario de las vías se le exige, a partir de la identificación de puntos críticos, que se coloque señalización donde se indique la presencia o el alto tráfico de fauna silvestre. Es muy usual ver una babilla en una señal de tránsito o alguna otra especie; eso ya nos pone en alerta y nos obliga a estar muy atentos”, indicó.

Por otro lado, dentro de las recomendaciones del estudio adelantado por Nelson Rangel, se encuentra la instalación de pasos de fauna (elevados, subterráneos o señalizados), la implementación de señalización ecológica en zonas críticas, reductores de velocidad en tramos sensibles y un diseño vial adaptado con principios de infraestructura verde, es decir, ecovías.

También sugirió la instalación de cámaras trampa y sensores de cruce de fauna, la zonificación oficial de áreas de paso de fauna silvestre, la integración de la biodiversidad en planes viales y licencias ambientales, así como la restauración ecológica de corredores biológicos costeros.

En cuanto a las medidas pedagógicas, el experto recomendó capacitaciones a conductores y actores locales, campañas de educación ambiental dirigidas a turistas, e inclusión de medidas de mitigación en normativas viales y ambientales.

Los atropellos a los cangrejos en B/quilla

En el 2019, la ciudad de Barranquilla afrontó esta problemática, cuando ciudadanos reportaron que cangrejos azules, provenientes de la Ciénaga de Mallorquín, estaban siendo atropellados en la vía que conecta a Las Flores con La Playa.

Ante esto, la concesionaria de la vía, Ruta Costera, construyó pasos de fauna para los cangrejos azules, basados en un estudio de su comportamiento. Además, instalaron barreras especiales que los guían y les permiten cruzar la vía de forma segura; adecuaron el separador central; instalaron barreras para guiarlos de forma segura; colocaron señalización y realizaron campañas de sensibilización a conductores y comunidades aledañas.

Desafíos para hacer un mapa de puntos críticos

De acuerdo con Rangel, para hacer un mapa de calor sobre este tipo de incidentes, se deben especificar los puntos críticos en donde más ocurren los atropellos, marcar las coordenadas, saber identificar el tipo de animal, tomarle una foto, y mandarla a una base de datos.

“En los países de primer mundo se hacen estos mapas de calor. Entonces, ese tipo de información acá no existe porque eso ya es una cosa un poco más avanzada. Aquí se intentó una vez con alguna plataforma, pero el problema es que meterle información a eso es muy complejo”, encontró el experto durante su investigación.