Un total en ventas cercanas a los 50 millones de pesos por 10.500 bollos y 6.000 fritos dejó la versión VIII del Festival del Bollo y el Frito en Ponedera.
El evento congregó a 225 matronas quienes a través de su experiencia gastronómica exaltaron su cultura y tradición, donde propios y visitantes se deleitaron con las innovaciones en bollos como el de bocadillo con queso y chorizo, angelito, yuca con coco, yuca simple, mazorca, bollo con pollo, entre otras delicias culinarias típicas.
Esta festividad nació hace ocho años por iniciativa de un colectivo de mujeres emprendedoras que querían mostrarle al departamento del Atlántico y al país todo lo que podían ofrecer el municipio.
El gobernador del Atlántico, Eduardo Verano, recorrió los 45 estand de la plaza municipal donde se efectuó la VIII versión del Festival del Bollo y el Frito para deleitarse de todas las novedades de las matronas, a quienes felicitó por cuidar de cada detalle, por mejorar la calidad de sus productos y sobre todo demostrar que lo que ellas mismas cultivan, pueden transformarse en una gran industria gastronómica.

“Esto ha sido una revolución en el mercadeo de los productos nativos, de los productos autóctonos y eso es cultura. Entonces se les metió en la cabeza a ellos que debíamos innovar y hacer nuevas presentaciones, nuevos productos, nuevas combinaciones de elementos y estoy sorprendido de los resultados, no solamente la parte estética, sino los sabores de los productos”, expresó el mandatario.
La secretaria de Cultura, Verónica Cantillo, destacó que “sin duda alguna hemos podido comprobar que Ponedera es un municipio rico culturalmente, no solo en gastronomía, sino también en artesanías y danza. Los propios y visitantes han podido disfrutar de la organización del festival que incluyó presentación de artistas y grupos musicales”.





















