
Palo de mango de la plaza Alfonso López de Valledupar cumplió 85 años
El árbol fue plantado un 7 de agosto de 1937 y ha hecho parte de la cultura vallenata, canciones y demás desde hace muchos años.
El famoso palo de mango, inmortalizado en muchas canciones vallenatas cumplió 85 años de su plantación, un 7 de agosto de 1937. El árbol lo plasmó el compositor Rafael Manjarréz Mendoza, en su canción ‘Ausencia sentimental’, interpretada por Silvio Brito, con el verso “si el mango está en la plaza igual”, y la respuesta sigue siendo sí, aún a 2022 sigue estando allí.
La idea de sembrarlo nació del ganadero y agricultor vallenato Eloy Quintero Baute, por iniciativa propia quien junto a sus amigos Luís Suárez González, Tránsito Estrada Barreto, Braulio Nieves Sánchez, Rafael Córdoba Guillén y Antonio Caballero, decidió plantar tres palos de mango en la plaza Alfonso López de Valledupar.
Sin embargo, a pesar de que dos retoños fueron puestos en el lugar, solamente uno logró echar raíces, las cuales se arraigaron en la cultura de los vallenatos. Las especies frutales fueron traídas de la finca ‘Bélgica’, ubicada en el camino viejo que conduce a La Paz, Cesar.
Este famoso árbol marcó la pauta durante 36 versiones del Festival de la Leyenda Vallenata (1968 a 2003), y fue testigo de la coronación de muchos ganadores en sus distintas categorías.
En su momento, Consuelo Araujo Noguera dijo: “Si el palo de mango hablara, tendría que empezar a contar las lágrimas que hemos derramado, las iras que he cogido, las injusticias que han cometido, los insultos que nos han proferido; pero también, el palo de mango terminaría cantando ‘El amor, amor’, para decirles a todos que el Festival de la Leyenda Vallenata es una institución, que gracias a Dios ya está consolidada, que es como un tren al que hay que prenderle la máquina y camina solo, y que además representa la más grande unidad, la fraternidad y la convivencia de un país cansado de duelos y afónico de largos llantos”.

El periodista Crispín Eduardo Rodríguez Pinedo, ideó la Asociación Protectora del Palo de Mango, cuya intención primaria era que tuviera el mantenimiento adecuado y las autoridades le prestaran la atención requerida.
“Siempre fui contertulio en el palo de mango. De esta manera me hice el propósito de conocer su historia, averiguar por su suerte y crear la asociación que en corto tiempo arrojó buenos resultados, especialmente cuando el palo se cundió de varias plagas”, comentó Rodríguez.