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La noche de este martes 10 de junio promete ser el mejor escaparate astronómico del mes para los colombianos, debido a que se podrá observar la Luna de fresa. Aunque su brillo máximo llegará a las 03:45 a. m. del miércoles 11 (hora del Este), el satélite lucirá más grande y luminoso mientras emerge sobre el horizonte oriental al anochecer del día anterior.

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Será, además, la Luna llena más baja del año en el hemisferio norte. La inclinación de 5,15 grados entre la órbita lunar y la eclíptica sitúa su recorrido muy cerca del horizonte, lo que realza matices amarillos o anaranjados durante el ascenso. Esa posición rasante —visible con claridad en latitudes ecuatoriales como Colombia— contrasta con la escasa altura que alcanzará en regiones árticas, donde pasará casi inadvertida.

En diálogo con EL HERALDO, Óscar Iván Ojeda, maestro en Ingeniería Aeroespacial de la Universidad de Purdue y director de la Fundación Cydonia, organización colombiana sin ánimo de lucro que busca promover y desarrollar el campo espacial en Colombia y Latinoamérica, explicó algunos detalles de este evento astronómico.

“La luna de fresa hace referencia a una tradición de los pueblo, originarios de América del Norte, en los cuales era la época de cosechar fresas, más o menos en esta época de lo que sería el verano para ellos (...) Uno a veces escucha que la luna esté muy bajita en el horizonte, así como el sol se pone rojo cuando se oculta y sale la luna también, pero pues digamos que el fenómeno no tiene nada que ver con la coloración que vaya a asumir. Sin embargo, pues siempre es muy bonito ver la luna llena”.

Ojeda agrega que su observación no requerirá de algún elemento especial. “La luna se puede ver a simple vista, por supuesto, se hacen eventos en algunos centros culturales que tengan telescopios o centros de divulgación, educación, entonces también es muy bonito de ver esta luna con binoculares. La idea es que este ciclo de la luna se repita por lo general cada 18 años largos”

Para apreciarla basta con un lugar de horizonte despejado y baja contaminación lumínica entre las 18:30 y las 20:00. La NASA subraya que, al estar la Luna en oposición al Sol, “revela la totalidad de su cara diurna”, brindando la visión más completa del disco lunar. Un par de binoculares realzará cráteres y mares, pero el fenómeno es perfectamente visible a simple vista.

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Quienes dispongan de cielo limpio podrán identificar, una hora después del ocaso lunar, la estrella gigante roja Antares brillando justo encima del disco. El contraste rojizo entre la supergigante de Escorpio y el gris pálido de la Luna ofrece una postal inusual.