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Jaime Pumarejo removió la nostalgia. La visita del alcalde de Barranquilla al estadio Metropolitano para recorrer las obras que se están realizando en los baños, develó un viejo símbolo de Junior que era infaltable en cada cita futbolera.

Entre polvo, telarañas y olvido, debajo de la tribuna noroccidental del escenario, el mandatario Distrital notó la presencia de la tradicional mascota del equipo rojiblanco, aquella que sepultó el primerizo apodo de ‘Miuras’ para darle paso al eterno ‘Tiburones’.

Ese escualo artesanal, hecho de alambre, papel y esponja, que ocultaba la cabeza y descansaba sobre los hombros de Óscar Borrás, el señor de abdomen pronunciado que todos conocen como ‘el Tiburón Borrás’, estaba ahí a oscuras y abandonado.

Tal vez era el sitio en el que Óscar lo escondía para no tener que estar trasladándolo desde la casa cada vez que había partido. Cualquiera podría pensar que es un cachivache, pero para la hinchada de Junior es una reliquia y así lo hizo ver a través de redes sociales.

Muchos fanáticos, entre ellos Joan Nieto, que es una especie de salvaguarda espontáneo de la historia de Junior, le pidió a Pumarejo que rescatara la antigua mascota. La solicitud tuvo respuesta positiva, muchos likes y comentarios recordando los días en que ese tiburón lideraba la salida de los jugadores del camerino.

Fue inevitable recordar que minutos antes de cada partido llevaba en sus fauces la camiseta del rival de turno y entraba una y otra vez en el arco visitante para generar el delirio del público y un grito al unísono: '¡Goooooooollll!

Repetidamente estremecía las redes en medio del calentamiento de los arqueros contrarios, que lo tomaban en buena onda o lo miraban mal de reojo.

'¿Qué será de la vida del ‘Tiburón Borrás’?', se preguntaron muchos. Don Óscar sigue viviendo en su casa en el barrio La Floresta, de Barranquilla, al lado de su compañera de vida, María Mancilla, y su hijo mayor Óscar Johnny Borrás.

SU ESTADO DE SALUD

Ya no es el mismo señor activo e independiente que recorría el gramado del ‘Metro’ con su gracia y alegría, y que también bailaba en Carnaval con su tiburón o el disfraz ‘Fundillo loco’. A sus 74 años de edad (el 25 de agosto cumple 75), según cuenta su esposa, Óscar Borrás sufre de alzheimer, parkinson, diabetes y la presión.

Hace seis años se moviliza con una silla de ruedas porque sus problemas de azúcar conllevaron a que le amputaran dos dedos del pie izquierdo y la mitad de su pie derecho.

'Se encuentra estable. Tiene médico en casa. Casi todo se lo hacen aquí, sus exámenes, la toma de presión. Muchas veces no reconoce a las personas, pero sí a nosotros. Sostiene una conversación, pero con muy palabras', dice doña María.

Borrás, pensionado de la Telefónica, con cuatro hijos, diez nietos y ocho bisnietos, conserva camisetas de Junior, pero ve muy poco de los partidos. No conoce los jugadores de ahora y en medio de sus achaques se aburre rápido frente al televisor.

'Ya no es como antes, como que se cansa', dice María.

15 AÑOS SIN IR AL ESTADIO

El recordado Tiburón desapareció del gramado y de las tribunas del estadio Metropolitano hace 15 años. La llegada del jocoso, bailador, brioso y carismático Willy (encarnado por Willy Evaristo De La Hoz Martínez), acabó con los días de gloria del viejo símbolo del Junior.

La aparición del tiburón inflable de plástico opacó rápidamente el show de Borrás, que poco a poco fue perdiendo protagonismo y encontrando trabas para poder ingresar a la cancha.

'Un día ‘Lucho’ Torres (antiguo comisario de campo) me dijo: viejo Óscar, no tiene permiso para entrar al campo', contó Borrás en una entrevista publicada en EL HERALDO en 2010.

Herido por el desplazamiento, decidió archivar su personaje y alejarse del escenario futbolero.

'Cantarle los goles al público me hacía feliz, me dio mucha tristeza que me cerraran las puertas de la cancha. Eso me partió el alma. Yo soy la mascota pionera en Colombia y el primero que llevó un tiburón al Romelio. Antes les decían los ‘Miuras’. Por mí empezaron a llamarlos los ‘Tiburones’', dijo Borrás en aquel diálogo.

A RESTAURARLO Y AL MUSEO

El alcalde Pumarejo confirmó a EL HERALDO que el tiburón hallado en el ‘Metro’ será restaurado y ubicado en el ‘Museo de Junior y la selección Colombia’ que está proyectado en el estadio Roberto Meléndez.

'Ya lo limpiamos. Vamos a recuperarlo y a ponerlo en el museo, es una de las piezas que tendremos ahí. Estamos viendo para ver quien lo puede restaurar de la mejor forma', informó Gabriel Berdugo, secretario de Recreación y Deportes del Distrito.

'Me encantaría eso', acepta María Mancilla. Al ‘Tiburón Borrás’ también le gustaría. En medio de la visita de EL HERALDO posó contento, tranquilo y lúcido con su tiburón inolvidable.