El moquillo, también conocido como distemper o enfermedad de Carré, es un virus infeccioso potencialmente letal que afecta a los caninos. Aquellos animales que se contagian tienen una mortalidad de un 50%, aproximadamente, según un informe hecho por Jorge Cuatrín, director de Sanidad Animal de Bariloche (Argentina).
La enfermedad de Carré puede considerarse en los perros algo similar al sarampión en los humanos, ya que es un virus proveniente de la familia Paramyxoviridae, perteneciente al género Morbillivirus. En EL HERALDO le explicamos la sintomatología, tratamiento y prevención de este.
Síntomas y tratamiento
En cuanto a los síntomas, el moquillo puede afectar el sistema respiratorio, digestivo, cutáneo, inmunológico y, en el peor de los casos, el nervioso.
El respiratorio, por ejemplo, causa en el paciente un cuadro de respiración fatigosa, secreción nasal y tos. También puede existir una infección bacteriana. El cutáneo produce pérdida de cabello excesivo y lesiones abiertas con costras. El nervioso, por su parte, puede producir ataques súbitos, espasmos musculares, decaimiento físico y hasta convulsiones. Los vómitos, diarrea e inapetencia son producto de un daño en el sistema digestivo.
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Sobre esta última afección, se conoció el caso de Cloe, una perra de raza husky siberiano que se contagió de moquillo a los nueve meses de edad y que vio comprometidos sus sistemas digestivo y respiratorio.
'Los síntomas de Cloe fueron moco, estornudos, ataques respiratorios y dejó de comer. Le hicieron unos exámenes y me dijeron que era gripa, que era algo normal. Pero luego empezó a vomitar y también seguía el moco, empeoraba, estaba decaída, triste y fue cuando la llevé a otra veterinaria que le diagnosticó moquillo', dijo Ana Gabriel Zúñiga, dueña del animal.
Cristina de La Puente fue la médico veterinaria encargada de atender el caso de Cloe y el de muchos caninos más en Barranquilla que se han contagiado de este virus. La mayoría de sus pacientes, dice, por fortuna se han recuperado.
'Primero la diagnosticamos con un test rápido de sangre, contrarrestamos la sintomatología, y ya que no hay ninguna cura para el moquillo, lo que hicimos fue tratar los síntomas puntuales del paciente con nebulizaciones, vitaminas, terapias de homotoxicología, antibioterapia y analgésicos'.
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La médico veterinaria indicó, además, que las enfermedades virales casi siempre son estacionales. El distemper se presenta sobre todo en la época más calurosa del año, porque el virus se reproduce de mejor forma en temperaturas altas. A su vez, entre el contacto y la sintomatología pueden pasar entre siete y 14 días. En el caso de la husky siberiana el diagnóstico se hizo a tiempo y por eso pudieron tratarla.
¿Cómo prevenirlo?
Al no haber una cura establecida para esta enfermedad, que además de afectar a los caninos también perjudica a animales silvestres, tales como hurones, visones, mofetas, nutrias, tejones, mapaches, entre otros, la mejor prevención, según la experta en veterinaria, es la vacunación a tiempo.
'Las vacunas se le colocan dependiendo del tiempo del destete con la mamá. Pero, generalmente, es a partir de los 45 días de nacido que inician inmunización contra distemper. Deben aplicarse de tres a cuatro refuerzos'.
Si el canino no está vacunado, Cristina recomienda que la mascota 'no salga de la casa a tener contacto con otros perros'. Además, la especialista resalta que hay que hacerles controles constantes a los animales, que tengan sus vitaminas, que estén desparasitados, y, sobre todo, una excelente nutrición, 'que el perro se alimente con comida de buena calidad'.
