Un grupo de trabajadores del área de la salud se plantaron en la entrada de la clínica Bahía, en Santa Marta, para protestar de manera pacífica por las intimidaciones y discriminaciones que han sufrido médicos, enfermeras y demás empleados, por la crisis del coronavirus.
Con banderas blancas, vestidos con sus trajes de bioseguridad y con las sirenas de las ambulancias encendidas, el personal de la salud hizo un llamado de tolerancia para la ciudadanía en general.
Las amenazas de muerte que sufrió en los últimos días el médico José Julián Buelvas, en Barranquilla, despertó la solidaridad de sus compañeros de profesión en toda la región Caribe.
Y es que estos trabajadores han sufrido estigmatización por algunas personas, quienes han incurrido en agresiones verbales. A principios de la emergencia sanitaria, se conocieron casos en Santa Marta, como por ejemplo, que varios taxistas les negaron el servicio a enfermeros o médicos.
Un total de 55 personas asociadas al mencionado sector se encontraban contagiadas con coronavirus, de los cuales, 53 le ganaron la batalla al virus, mientras dos fallecieron. Las áreas ocupacionales del personal de la salud afectados por la COVID-19 fueron 24 auxiliares de enfermería, siete enfermeras, ocho médicos, seis administrativos, cuatro personas del servicio general, tres vigilantes, dos fisioterapeutas y un administrador de farmacia.
Se conoció que el secretario de Salud del Distrito, Henrique Toscano Salas, se reunió con el equipo de salud pública para seguir fortaleciendo el trabajo se que se realiza durante la pandemia del COVID-19.
Cifras del Ministerio de Salud detallan que Santa Marta tiene 434 casos confirmados de coronavirus.