La emergencia sanitaria originada por la covid-19 obligó al Gobierno nacional, a través del Ministerio de Justicia, a tomar diversas medidas para mitigar la propagación del virus en el interior de los centros penitenciarios del país, pues el hacinamiento sobrepasaba el 53%, es decir que había una sobrepoblación de 42.907 internos.
Es así como a través de la revisión de los procesos, al menos 21.187 reclusos quedaron en libertad en todo el país y otros tantos accedieron al beneficio de la medida de detención domiciliaria.
Fue así como en la Penitenciaría de El Bosque, en Barranquilla, hasta el 16 de marzo de 2020 registraba 1.657 personas con detención intramural, 505 indiciados con detención domiciliaria (medida preventiva) y 897 con prisión domiciliaria (medida de aseguramiento tras sentencia de un juez).
Pero con la medida adoptada, hasta el 30 de marzo de 2021, la cifra varió hasta llegar a 1.108 internos dentro del establecimiento penitenciario, 577 con detención domiciliaria y 1.082 con prisión domiciliaria.
Por su parte, la cárcel Modelo tenía en marzo de 2020 1.000 hombres presos, 3.585 con detención domiciliaria y 554 con prisión domiciliaria, pero a marzo de 2021 las cifras llegaron a 693 personas con medida intramural, 3.514 con detención domiciliaria y 617 con prisión domiciliaria.
Es decir, que durante el año que lleva la pandemia en el país cientos de reos en Barranquilla han sido beneficiados con estas medidas en sus domicilios y otros más que quedaron en libertad.
Asesinato de ‘El Negro’ y ‘Popo’
Pedro Gabriel Padilla Aguirre, alias Popo, y Hernando Padilla Aguirre, ‘El Negro’, eran responsables, según las autoridades, de las extorsiones y homicidios selectivos en el suroccidente de Barranquilla y fueron asesinados a mediados de marzo en un ataque sicarial en el barrio Los Ángeles ll, cuando se encontraban reunidos en una vivienda. El escolta que los cuidaba también murió.
Según labores de inteligencia, estos sujetos seguían en su actuar criminal en esa zona de la capital del Atlántico y este atentado habría obedecido a un ajuste de cuentas entre bandas criminales.
Al progenitor de uno de estos dos hombres –que tenían amplio prontuario criminal– lo asesinaron en 2019, también por la vendetta que libraban en su momento estas bandas en esa zona.
Tras conocerse el crimen, las autoridades reportaron que tanto ‘Popo’ como ‘El Negro’ tenían detención domiciliaria.
‘Andresito’, un reincidente
Andrés Felipe Garnica Romero, alias Andresito, gozaba de detención domiciliaria tras ser procesado por el delito de hurto, pero fue capturado el pasado mes de febrero en la calle 56 con carrera 11, barrio La Ceiba, violando la medida y por el delito de homicidio y de porte ilegal de armas de fuego.
Las autoridades lo acusan de haber asesinado de varios impactos de bala a un panadero en el municipio de Malambo, área metropolitana de esta capital.
‘Andresito’ fue llevado a la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía General de la Nación y fue judicializado por los cargos antes descritos, sumándole la fuga de presos.





















