Colombia es uno de los cinco mercados latinoamericanos donde habrán modificaciones administrativas por el divorcio entre el fabricante suizo Nestlé y uno de los mayores exportadores de leche en el mundo, la cooperativa neozelandesa Fonterra, decisión con la que se pone fin a 11 años de matrimonio comercial.
El principal cambio en el país está relacionado con el control de una planta de leche en polvo en Valledupar (Cesar), cuya propiedad estaba dividida en partes iguales entre Nestlé (con el 50% del capital accionario) y Fonterra (con el 50% restante).
Manuel Andrés, presidente de Nestlé Colombia, explicó que con el divorcio empresarial la compañía le comprará a Fonterra (por un monto que no fue revelado) ese 50% de capital accionario que está en su poder.
'La meta es que este proceso dure hasta diciembre, por lo que podemos asegurar que al cierre de 2014 vamos a tener el control total de la fábrica de leche en polvo de Valledupar donde se producen las marcas Klim, Klim Nutri Rinde y El Rodeo', expresó Andrés.
Klim, según precisó el presidente de Nestlé Colombia, tiene casi las dos terceras partes del mercado de leche en polvo en el territorio nacional, que en la actualidad es un nicho de mercado modesto frente a otras categorías del negocio lácteo.
Ambas compañías operaban la planta de Valledupar, que procesa entre 23.000 y 25.000 toneladas de leche en polvo al año, bajo una empresa creada en 2003 llamada Dairy Partners Americas (DPA). Es precisamente esta corporación la que Fonterra y Nestlé decidieron liquidar. La República