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Con el pitazo final llegó el conato de pelea entre la Selección Colombia y Brasil. Neymar, dolido por la derrota, le lanzó un pelotazo a Pablo Armero y de inmediato Jeison Murillo le fue a reclamar, pero Neymar le lanzó un cabezazo.

En respaldo del defensa central de la Selección Colombia llegó Carlos Bacca, quien no toleró la agresión y empujó con fortaleza al delantero del Barcelona de España.

Ante lo sucedido todos los jugadores de Brasil reaccionaron y rodearon al delantero de Puerto Colombia.

A Bacca lo intentó agredir el lateral derecho Dani Alves, pero fue Robinho quien le rompió la camiseta y entró en un forcejeo con el atlanticense.

El cuerpo técnico de las dos escuadras ingresó al campo para intentar calmar los ánimos.

En las imágenes que mostró la televisión se ve a un Bacca indignado y molesto, que tuvo que ser calmado por Luis Fernando Muriel.

Por este acto, el árbitro chileno Enrique Osses decidió expulsar a Bacca y Neymar.