Sanar las heridas de Colombia, retratar su historia y la de sus hijos más abandonados. Esa es la misión de los cinco documentales colombianos que por su gran impacto fueron seleccionados a los Good Pitch en su primera versión en el país.
Los proyectos fueron escogidos entre más de 230 trabajos de cine documental que se presentaron a la convocatoria. Sus temáticas centrales abordan temas que golpean directo al corazón colombiano: posconflicto, empoderamiento de comunidades, sostenibilidad y medio ambiente.
Desde octubre del año pasado un grupo de especialistas asesoraron a cada participante por medio de talleres presenciales, un proceso que culminará en Barranquilla. La Arenosa acogerá la ceremonia el 19 de abril en un escenario que está por definir.
En este pitch, los cinco proyectos tendrán la oportunidad de obtener recursos y establecer alianzas. En sus ediciones pasadas, los Good Pitch– que llegan gracias al British Council–, tuvieron como sede a Argentina, India, Australia y Sudáfrica.
‘ALMA DEL DESIERTO'.
Georgina, una indígena transgénero Wayúu, emprende un viaje en busca de un reencuentro con su familia, tras de décadas de exilio solitario. Ese largo viaje la enfrenta crudamente con el abandono en el que se encuentra su comunidad, la corrupción en el país, la crisis en Venezuela y los robos de agua de una mina de carbón. El ‘road movie’ documental es dirigido por Mónica Taboada Tapia y producido por Santiago Fernández Suárez.
‘LA MUJER DE LOS 7 NOMBRES’
Son siete identidades y distintas formas de ser en una sola persona. Rocío Caro Yineth fue reclutada a los 12 años por las guerrillas de las Farc y hoy trabaja para el gobierno. Ahora, desde la sala de su casa, revela el peso que supone volverse a poner un uniforme camuflado, la vanidad de una mujer citadina y un conjunto de opuestos que aún no puede dejar atrás. El largometraje es dirigido por Danniela Castro y contó con la producción por Rocío Caro.
‘RÍO SONORO’
En una travesía por el río Magdalena se busca comprender los sonidos, encuentros musicales, personajes e historias de la principal arteria fluvial. El documental, en el que participa el grupo Bomba Estéreo, registra el intercambio entre el sonido ancestral y el contemporáneo. El proyecto es dirigido y producido por Simón Hernández y Simón Mejía, miembro de la banda, quienes a través del recorrido exponen la manera en la que se interactúa con el río y el ritmo.
‘NO SOY YO QUIEN GRITA’
Yira Plaza O'Byrne, la directora de este documental, cuenta su propia historia. Su padre, dirigente sindical, estuvo a punto de ser asesinado en un atentado en 2014. 'Él ha apostado todo por la revolución y me heredó su convicción', afirma Plaza en el largometraje, que reflexiona sobre el sentido de esas luchas y que busca romper con los estigmas que cargan los líderes sociales en un país cuya 'generación parece no tener sueños colectivos'.
‘LA FRONTERA INVISIBLE’
Las líneas imaginarias están fuertemente demarcadas en la vida cotidiana de una comunidad afrocolombiana. El documental busca suscitar la compasión, pues quienes nacen y habitan en estas zonas están codificados a la resignación ante la violencia. Aquí, Alejandro Quijano (director) y Nicolás van Hemelryck y Clare Weiskopf (productores) muestran el rostro humano de quienes no solo roban y matan, sino que también ríen y lloran.
‘ALIAS YINETH’
Son siete identidades y distintas formas de ser en una sola persona. Rocío Caro Yineth fue reclutada a los 12 años por las guerrillas de las Farc y hoy trabaja para el gobierno. Ahora, desde la sala de su casa, revela el peso que supone volverse a poner un uniforme camuflado, la vanidad de una mujer citadina y un conjunto de opuestos que aún no puede dejar atrás. El largometraje es dirigido por Danniela Castro y contó con la producción por Rocío Caro.
‘RÍO SONORO’
En una travesía por el río Magdalena se busca comprender los sonidos, encuentros musicales, personajes e historias de la principal arteria fluvial. El documental, en el que participa el grupo Bomba Estéreo, registra el intercambio entre el sonido ancestral y el contemporáneo. El proyecto es dirigido y producido por Simón Hernández y Simón Mejía, miembro de la banda, quienes a través del recorrido exponen la manera en la que se interactúa con el río y el ritmo.
‘LA FRONTERA INVISIBLE’
Las líneas imaginarias están fuertemente demarcadas en la vida cotidiana de una comunidad afrocolombiana. El documental busca suscitar la compasión, pues quienes nacen y habitan en estas zonas están codificados a la resignación ante la violencia. Aquí, Alejandro Quijano (director) y Nicolás van Hemelryck y Clare Weiskopf (productores) muestran el rostro humano de quienes no solo roban y matan, sino que también ríen y lloran.
‘NO SOY YO QUIEN GRITA’
Yira Plaza O'Byrne, la directora de este documental, cuenta su propia historia. Su padre, dirigente sindical, estuvo a punto de ser asesinado en un atentado en 2014. 'Él ha apostado todo por la revolución y me heredó su convicción', afirma Plaza en el largometraje, que reflexiona sobre el sentido de esas luchas y que busca romper con los estigmas que cargan los líderes sociales en un país cuya 'generación parece no tener sueños colectivos'.
