Este martes se reunieron durante tres horas los representantes de la Cancillería y de la empresa británica Thomas Greg & Sons para definir la continuidad de la prestación del servicio de la expedición de pasaportes en el país.
Esto debido a que el próximo 2 de octubre se vence la prórroga del contrato con la compañía que hace el documento desde hace alrededor de dos décadas en Colombia.
En medio del encuentro, mediado por la Procuraduría, Thomas Greg planteó la posibilidad de que se sigan imprimiendo los pasaportes por lo menos un año más después del término del contrato.

En septiembre del año entrante el Gobierno esperaría que la Imprenta Nacional ya haya desarrollado las capacidades institucionales y técnicas, con la asesoría de un gobierno aliado, que podría ser Francia y Portugal, Canadá, Alemania Países Bajos o Polonia, para asumir esa labor.
Entre tanto, sigue sobre la mesa la conciliación sobre la demanda interpuesta por la empresa británica contra el Ministerio de Relaciones Exteriores por $117 mil millones, luego de que se parara la licitación del año pasado, según el Ejecutivo, porque violaba el principio de libre competencia.
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Por ahora, se ha conocido que el Ministerio de Relaciones Exteriores entregue otros $21 mil millones a Thomas Greg debido a que ante la incertidumbre de qué pasará con la expedición de pasaportes ha aumentado el número de solicitudes del documento.
Y lo que se espera este martes es que el canciller Luis Gilberto Murillo revele en el debate de control político al que ha Sido citado en la plenaria del Senado sobre el avance de las negociaciones con la compañía británica.





















