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No importa si choca un asteroide contra la superficie del planeta o si explota una supernova en una galaxia cercana: en cualquier caso habrá una forma de vida que sobrevivirá en el planeta: el tardígrado.

El Grupo de Investigación en Manejo y Conservación de Fauna y Flora y Ecosistemas Estratégicos Neotropicales, Miku, de la Universidad del Magdalena, encontró en la Sierra Nevada de Santa Marta seis nuevas especies de tardígrados, comúnmente llamados ‘ositos de agua’, un microanimal de ocho patas, considerado el más resistente del mundo, al punto que solo con la muerte del sol dejarían de existir.

El descubrimiento hace parte de investigaciones relacionadas con el análisis de la biodiversidad en el ecosistema estratégico, dirigido por el doctor en Zoología Sigmer Quiroga Cárdenas, con un grupo conformado por docentes y estudiantes.

En salidas de campo realizadas en el marco de varios proyectos de investigación, se recolectaron muestras de musgos y líquenes en los que fueron hallados los tardígrados. Posteriormente se realizaron micropreparados, que más tarde fueron analizados por el grupo de expertos y estudiantes de Miku.

'Estamos poniendo a disposición del país y el mundo científico especies con las que podemos investigar los mecanismos de tolerancia que serán de gran utilidad para la ciencia', indicó Quiroga.

Las especies

Diferentes especies de tardígrados como Bryodelphax kristenseni, Doryphoribius rosanae, Itaquascon pilatoi, Milnesium kogui, Minibiotus pentannulatus, Paramacrobiotus sagani, hacen parte hoy de los ejemplares depositados en el Centro de Colecciones Biológicas de la Universidad del Magdalena, lo que constituye la colección más grande de estos organismos en Colombia.

Para Quiroga, el estudio de la capacidad de resistencia de estos animales microscópicos puede ser de interés en diferentes campos como la medicina, farmacéutica e ingeniería de alimentos, entre otros.

'Estos organismos acuáticos cuando el agua escasea poseen la capacidad de entrar en un estado de anhidrobiosis en la que pueden resistir condiciones muy extremas de temperaturas o niveles de radiación que serían letales para otros organismos', explicó.

Añadió además que,la anhidrobiosis, es la suspensión temporal de los procesos vitales de un organismo que tiene que permanecer mucho tiempo en estado de desecación (perder la humedad).

'Si se descifran los mecanismos que utilizan estos organismos para preservar intacta su estructura celular y su ADN cuando están en estado seco, podrían crearse nuevas alternativas para conservar, por ejemplo, órganos humanos', precisó.